
Antolín Goya
Coordinador General de Coordinadora
El presidente de la patronal minoritaria de empresas portuarias, ASOPORT, Joaquín Coello, se ha enfrascado en una cruzada personal lanzando diversos alegatos con afirmaciones inciertas en contra de la regulación del sector y con mentiras en un discurso arcaico, que ni siquiera es compartido por las empresas de la propia asociación a la que representa.
El Sr. Coello ha optado por el disparate con la única finalidad de obstruir y torpedear. No admite el derecho de la asociación empresarial mayoritaria y el papel de los sindicatos en una negociación y anda disgustado porque parece que querría poder despedir a todos los trabajadores de la estiba a su antojo, afirma el coordinador general de Coordinadora, Antolín Goya.
Por su forma de actuar, se ve que no termina de superar que ya no es el presidente de la patronal mayoritaria, ANESCO, y que ni siquiera sus empresas asociadas le hacen caso. Está solo en su particular batalla, por lo que ha optado por boicotear cualquier acuerdo o negociación sobre la estiba.
Dicho esto, es necesario aclarar varios asuntos sobre las continuas críticas que se están vertiendo desde la asociación ASOPORT. Es preciso recordar que la patronal mayoritaria del sector, que es ANESCO, invitó a ASOPORT a sentarse en la mesa de negociación para abordar la regulación de las relaciones del sector, pero el Sr. Coello no quiso, se negó, mientras sus empresas sí lo han hecho en cada uno de los puertos donde están presentes.
Ante la afirmación de ASOPORT de que no ha cambiado nada, todo lo contrario. Se ha producido un cambio sustancial en la organización del sector. Las empresas estibadoras se pueden establecer y ejercer su actividad en los puertos españoles sin las limitaciones que establecía la ley de puertos con las SAGEP y con plena libertad en la contratación de personal.
Además, con la contraprestación sindical de la garantía del empleo, se negoció por Anesco un acuerdo de mejora de los sistemas de organización del trabajo y una significativa disminución de costes laborales de la estiba lo que ha contribuido a mejorar un sistema más eficiente que favorece la competitividad de los puertos.
Nos guste o no a los sindicatos, el sector se ha liberalizado, cosa de la que parece que el presidente de ASOPORT aún no tiene constancia o se niega a enterarse.
Las empresas, en el ejercicio de su libertad, inclusive las asociadas a ASOPORT se han separado de las SAGEP; han disuelto las SAGEP que han considerado oportuno; operan con su propio personal; han constituido Centros Portuarios de Empleo (CPE) mutualizando su relación con el personal en régimen de rotación y plena disponibilidad; han constituido centros de formación específicos para la estiba portuaria; y, además, aproximadamente el 30% de la contratación del personal se hace a través de Empresas Temporales de Empleo (ETT) que no son CPE.
Además, existen puertos en los que las empresas operan directamente con su personal y hay que añadir que desde Puertos del Estado se habilitó un procedimiento para homologar las acreditaciones de las jornadas de servicio portuario de manipulación de mercancías, alcanzando a 2.367 personas.
Por tanto, es difícil entender cómo el presidente de ASOPORT continúa con un discurso rancio diciendo que no ha cambiado nada y de que no se ha aplicado la sentencia del TJCE; otra cosa muy distinta es que quien fuera presidente de ANESCO, aún no haya superado el haber perdido esa plaza y siga molesto y frustrado.
Sobre sus constantes críticas a los sindicatos, se ve que no admite que puedan existir relaciones laborales dinámicas entre los sindicatos y las asociaciones empresariales.
Consecuencias laborales
Respecto a las consecuencias laborales de las que habla y de las que parece ahora tan preocupado, da la impresión de que la asociación que representa lo que busca es una reforma laboral específica para la estiba en el que los derechos de los trabajadores desaparezcan, y si pudiera, incluiría al resto de sectores.
Es más, da toda la impresión de que el presidente de ASOPORT quiere que el principio de subrogación empresarial, recogido en el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores, y la garantía de los derechos laborales no se cumpla entre el personal de los trabajadores de ETT.
Pero la realidad es que el personal de una ETT, según la Ley, tiene el derecho a reclamar la condición de fijo de la empresa que lo contrata cuando pasa un determinado periodo de tiempo.
En el caso de los estibadores portuarios de los CPE en régimen de rotación carecemos del derecho a quedarnos fijos en la empresa que nos contrate porque estamos en un régimen mutual donde un conjunto de empresas tiene contratado y a su disposición a un conjunto de trabajadores sin que exista cesión ilegal de personal.
Precisamente esta idea de las relaciones laborales es lo que el presidente de ASOPORT no termina de asumir como un cambio que, además, cumple con los pronunciamientos del TJUE.
Por último, el presidente de ASOPORT pretende confundir cuando afirma que la sentencia del TJUE habla de la reforma laboral de la estiba portuaria; pero la realidad es que la sentencia de lo que habla es del libre establecimiento de las empresas, y apunta que una alternativa es que se constituyeran conjuntos de empresas para la contratación de personal.
Dicho esto, creo que lo que merece el sector es que el Sr. Joaquim Coello se dedique a otra cosa, a sus aficiones si quiere, pero no a hundir a la economía de los puertos, porque actualmente, nadie le sigue y poco representa.