Las instituciones invertirán 530 M€ en la reordenación de la red ferroviaria de Valencia

La Generalitat Valenciana, el Gobierno central y el Ayuntamiento de Valencia firmaron el jueves 28 de julio el convenio que permitirá la construcción del canal ferroviario de acceso a la ciudad del Turia. El presidente del Consell, Ximo Puig, señaló que la firma del documento significa “un gran salto para recorrer el primer kilómetro de  una nueva vía” con la que adentrarse “en un cambio urbano absolutamente transformador para la vida de los valencianos y valencianas”.

Puig se pronunció en estos términos tras firmar en el Palau de la Generalitat con la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, y el alcalde de Valencia, Joan Ribó, del convenio para la ejecución de las obras de la fase 3 de integración del ferrocarril en la ciudad de Valencia, una iniciativa incluida en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado con fondos Next Generation EU.

El proyecto cuenta con una inversión superior a los 530 millones de euros, de los que la Generalitat aportará 133 millones, y contempla el nuevo canal de acceso, con el soterramiento de todas las vías de acceso a las estaciones de Valencia Nord y Joaquín Sorolla, la remodelación de esta última estación y la ampliación de su aparcamiento, la definición de las instalaciones de protección civil y seguridad de los túneles de acceso, un nuevo cambiador de ancho, nuevas vías de apoyo a la estación de Joaquín Sorolla y la adecuación de los túneles ya ejecutados de ancho convencional, entre otras actuaciones.

Como subrayó el presidente de la Generalitat, “hace un siglo y medio, Valencia derribó su muralla de piedra medieval, y ahora se empieza a derribar la muralla de hierro de las vías, la frontera que separa, como una cicatriz, a los barrios del sur”. “Y todo por 17 centímetros, esa es la altura de un raíl, menos que un escalón, pero el abismo urbano que han generado empieza a desaparecer”, ha agregado.

Puig destacó que el convenio cumple una “antigua” reivindicación de la ciudad

El presidente manifestó que este convenio da satisfacción a una de las “antiguas reivindicaciones” de la ciudad de Valencia y todo un reto que se remonta al 1958 y sobre el que se ha debatido especialmente desde el 2023, si bien ha sido ahora, con el actual Gobierno central, cuando se ha hablado “con el Boletín Oficial del Estado en la mano”, es decir, plasmando en él las licitaciones.

El responsable de la Generalitat agradeció así al Ministerio de Transportes que esté “liderando este esfuerzo compartido de las tres administraciones” y que haya dado el paso para la puesta en marcha de un proyecto que permitirá no solo “coser el sur de la ciudad”, sino dar respuesta a “distintos desafíos en mapas superpuestos”.

En este sentido, se refirió, en primer lugar, a la dimensión local de este canal de acceso, que permitirá cohesionar barrios separados y modificará la trama urbana en el sur, pero también  aludió a que la infraestructura será “el paso previo a una transformación mayor: la reordenación de la red arterial ferroviaria de València”.

El presidente pide acelerar los trabajos del túnel pasante

“Ahí necesitamos acelerar, no perder ni un día para los trabajos del túnel pasante, obra fundamental del Corredor Mediterráneo”, manifestó Puig, que considera “inaplazable” acabar con el “cul de sac” ferroviario de la ciudad. “Valencia lo merece y lo necesita el Corredor Mediterráneo”, indicó.

Puig también resaltó que el canal de acceso incorpora una vertiente metropolitana, ya que permitirá potenciar las Cercanías, y, por último, una dimensión europea, que sitúa de forma estratégica a la Comunitat Valenciana “en la Europa de los corredores”.

Por ello, reiteró su agradecimiento a Gobierno central, que, además de dar este paso adelante para que empiece a emerger una “nueva Valencia”, ha saldado la deuda de la Marina -como ha recordado, ascendía a 400 millones- y también “ha realizado las mayores transferencias para inversión social en el peor momento, ha respaldado la mayor inversión industrial de la historia con Volkswagen y ha situado el Corredor Mediterráneo ya en un punto de no retorno”.