Los astilleros vizcaínos de Zamakona han recibido el encargo para la construcción del mayor buque de pesca por arrastre pelágico del mundo, que, a su vez, será más respetuoso con el medio ambiente. La danesa Gitte Henning ha contratado por primera vez con el astillero vasco un buque que tendrá 87,6 metros de eslora y 20 metros de manga.
El barco ha sido diseñado conjuntamente por Henning, Salt Ship Design y Zamakona e incorpora una serie de soluciones respetuosas con el medio ambiente, muchas de ellas nuevas en la pesca pelágica. A lo largo del proceso de diseño y en la elección de los equipos, la atención se ha centrado en mejorar la calidad del pescado y reducir las emisiones a través del consumo de energía reducido y la producción eficiente de energía.
Consumo reducido e híbrido
El nuevo buque, que se construirá en las instalaciones de Zamakona en el puerto de Bilbao, tendrá un consumo reducido de energía debido a varias innovaciones. Entre ellas, sustituirá la propulsión de hélice única por dos propulsores maniobrables y un nuevo diseño del casco, de doble codaste. La propulsión se realiza mediante motores eléctricos de imanes permanentes, de menor consumo, alimentados por generadores diésel y baterías. También el sistema de maquinillas es totalmente eléctrico, con recuperadores de energía en el largado de redes, eliminando los componentes hidráulicos, potencial fuente de contaminación.
Todos los motores eléctricos, desde las maquinillas a las bombas, están controlados por un variador de frecuencia y los cinco generadores diésel están situados en dos salas de máquinas independientes para la mayor seguridad posible del entorno de trabajo, alimentan los motores de propulsión PM y el resto de elementos de consumo de energía a bordo. Las baterías también están situadas en una sala aparte, procurando así una fuente adicional de energía de emergencia y, de manera adicional, contribuyen a reducir el ruido y las emisiones en puerto de manera importante.
La compañía Gitte Henning está abriendo el camino hacia una nueva era de la pesca ecológica en Dinamarca, debido a que la fórmula del arrastre es la más perjudicial para los fondos marinos y el medio ambiente y está estrictamente regulada en la mayoría de los países.
