Brittany Ferries ha marcado un nuevo hito en su histórica relación de casi medio siglo con el puerto de Santander con la inauguración de su nuevo buque “Santoña”. Este es el primer barco de la compañía que lleva nombre e inspiración cántabra a bordo, todo un orgullo, sobre todo para el personal de la región.

Para conmemorar este acto, la naviera ha invitado a un selecto grupo –en el que se encontraba El Canal– de clientes, transitarios y cargadores que pudieron disfrutar de un nuevo barco a estrenar, conocer sus servicios, su gastronomía y el buen hacer tanto de su tripulación como de su equipo directivo.
Posteriormente, hubo un evento más institucional en el que participaron director general de Brittany Ferries, Christophe Mathieu, y su director para la Península Ibérica, Roberto Castilla; el presidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla; el consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Francisco Javier López Marcano; el presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, Francisco Martín; la alcaldesa de Santander, Gema Igual y la delegada del Gobierno, Ainhoa Quiñones, entre otros.
Eficiencia y ecología
El “Santoña” es uno de los barcos más modernos de toda la flota de Brittany Ferries, junto con su gemelo “Salamanca”, el primero en utilizar el GNL para su propulsión.
Su objetivo es reducir al máximo posible el impacto medioambiental, y lo hace de dos maneras. Una es gracias a su diseño porque su largo y delgado casco, hace que la navegación sea excelente ante cualquier climatología posible, algo a lo que también ayuda la capa de silicona que recubre todo el casco y que hace que se reduzca la fricción, consiguiendo una navegación más suave y reduciendo así el consumo de combustible.

De otro lado, el “Santoña” utiliza el GNL como combustible con motores de última generación que ajustan la velocidad de crucero y el funcionamiento del software de rutas, lo que contribuye a mejorar la eficiencia y la comodidad para todos. Además, logran la práctica eliminación de contaminantes de la calidad del aire, como las partículas, el dióxido de azufre, los óxidos de nitrógeno (NOx) y las emisiones de CO2 en un 20%.
Ambos buques, “Santoña” y “Salamanca”, han sido diseñados para no depender de exclusivamente de un combustible. Y en el futuro podrán utilizar fuentes de energía aún más limpias, como el e-metano, cuando estén disponibles. Por tanto, tienen el potencial para ser aún más sostenibles durante su larga vida útil.
En esta línea, en 2025 está prevista la llegada de dos nuevos buques híbridos (GNL + electricidad) para la conexión del Canal de la Mancha, entre los puertos de Portsmouth con St. Malo y Caen.
Cabe recordar que el “Santoña” dispone de 2,7 km lineales para vehículos, lo que se traduce en unos 150 camiones combinados con vehículos ligeros. Se trata de un buque de la clase E-Flexer, que dispone de 214,5 metros de eslora y 27,8 metros de manga, desplazando 41.716 toneladas. En sus con diez cubiertas, puede alojar hasta 1.015 pasajeros en 341 cabinas, 22 de ellas adaptadas para mascotas y su tripulación se compone de 85 personas.
Bunkering de GNL
La adopción del Gas Natural Licuado como combustible ha requerido del puerto de Santander de la instalación de una infraestructura para el repostaje o bunkering. En este caso, con la colaboración de Repsol, se ha instalado un tanque criogénico con una capacidad de almacenamiento de 1.000 m3 que permite mantener el gas natural en estado líquido a -160°C.
El GNL pasa en estado líquido a los tanques del “Santoña” donde, mediante un sistema de regasificación, se convierten al estado gaseoso, el necesario para la combustión de los motores marinos. El diseño flexible de la terminal le permite dar servicio a diferentes buques en el futuro, lo que representa una importante oportunidad de descarbonización para las operaciones portuarias.
Según dijo Christophe Mathieu, “sin una terminal donde poder abastecerse de GNL el Santoña no estaría hoy aquí” por lo que agradeció a su “socio”, el puerto de Santander, y a Repsol “por darse cuenta del potencial de nuestro nuevo buque” porque no tendría sentido que Brittany Ferries sacase al mercado “un buque tan limpio como el Santoña si no hay dónde repostarlo”.
Reconocimiento oficial
Miguel Ángel Revilla y Francisco Marcano han expresado su agradecimiento a Brittany Ferries por haber tenido el gesto de dedicar el nombre de la localidad santoñesa a esta «oficina de turismo marítima» que va a contribuir, aún más, a la promoción de Cantabria en el Reino Unido, que es uno de los principales mercados turísticos de la región. Sin ir más lejos, el año pasado llegaron en ferry a Santander 260.000 visitantes, récord absoluto de la compañía, de los que más del 90% fueron británicos.
Para el presidente, estos datos son «espectaculares» y confirman que las previsiones sobre los efectos del Brexit en Cantabria, que afectaban especialmente al tráfico de pasajeros y mercancías de Brittany Ferries, no se han cumplido. «Afortunadamente, se equivocaron. Lo tenemos todo lleno, prácticamente», ha dicho Revilla, que también ha ensalzado la «historia de éxito» de esta empresa en Cantabria, a la que permanece ligada desde hace 45 años.
Sobre el barco, ha destacado la vinculación histórica de Santoña con el mundo de la mar y ha recordado la figura de Juan de la Cosa, el autor del primer mapamundi que se conserva. Asimismo, ha puesto en valor el hecho de que Brittany Ferries haya contratado a 52 cántabros para trabajar en el buque, la primera vez que la firma no contrata a personal exclusivamente francés.
Santander y Brittany Ferries baten su récord
Brittany Ferries consiguió en el 2022 su récord de pasajeros en el puerto de Santander, sumando 239.000 viajeros, y batiendo el anterior máximo registro, del 2018, cuando se contabilizaron 226.000 pasajeros. Tras dos años de afecciones Covid-19, Santander y Cantabria vuelven a ser uno de los destinos favoritos de los clientes de Brittany Ferries. “Más de un 30 por cierto de pasajeros deciden parar y pasar sus vacaciones o parte de ellas en Cantabria” recordó el consejero Javier López Marcano.
La naviera destaca que “son ya 45 años los que Brittany Ferries lleva conectando Cantabria con Inglaterra, lo que nos convierte en una pieza clave de la economía local. Brittany Ferries nació hace 50 años no solo con la ambición de transportar mercancías y veraneantes, sino también de participar en el crecimiento de las regiones a las que presta servicio”.