La empresa Bombas Itur, actualmente KSB Spain, celebra el centenario de su fundación, allá por el 20 de mayo de 1920, cuando Manuel Aranzabal Iturzaeta crea en la localidad guipuzcoana de Getaria una empresa pionera en la fabricación de bombas y equipos de bombeo a nivel nacional. Miembro de Adimde, el polo de construcción naval vasco, la firma se trasladó en 1930 se trasladó a Zarautz, también en Gipuzkoa, donde comenzó a desarrollar una gama de productos enfocados principalmente al mercado naval.
La construcción de un nuevo centro de producción en 1966 permitió a la familia Aranzabal desarrollar nuevos productos para aplicaciones como industria, energía, edificación y gestión de aguas, a la vez que fortalecía su presencia en el mercado naval internacional. Se inició también un proceso de implantación a través de la apertura de delegaciones y oficinas comerciales por todo el territorio nacional y en Cuba, posicionando a Bombas Itur como líder en el mercado español.
Mercado global y personas
A finales del siglo pasado, la firma cambió de manos y se reestructuró para competir en un mercado cada vez más global, un movimiento que captó la atención de la multinacional alemana KSB, compañía líder mundial dedicada a la fabricación de bombas y válvulas y que buscaba en aquel momento afianzar su presencia en el mercado español. A finales de 2003 Bombas Itur fue integrada en el Grupo KSB y también cambió su denominación.
Desde entonces, KSB Spain ha vivido una gran transformación, con la realización de fuertes inversiones en maquinaria y bienes de equipo, como el banco de prueba más moderno de España preparado para la realización de pruebas on-line a distancia, la creación de un centro de formación, una nueva red de oficinas y centros de servicio y una moderna red de distribuidores oficiales, entre otros.
El centro de producción de Zarautz se ha convertido en un centro
especializado en la fabricación de varias gamas de bombas para clientes
nacionales e internacionales. Paralelamente, KSB Spain ha complementado la
venta de esta gama local con el resto de la gama fabricada a lo largo de los
más de 30 centros productivos del Grupo KSB.
La firma se ha preparado para afrontar los retos actuales, como la digitalización y la industria 4.0, trabajando en la mejora continua y en el desarrollo de nuevos productos y con las personas como el gran activo en KSB. Así, ha desarrollado programas formativos de manera continuada y los cerca de 300 trabajadores que conforman la plantilla han adquirido un elevado perfil técnico-especialista en todos los procesos en los que participan.
