El puerto de Tarragona ha celebrado este martes un simulacro de emergencia para evaluar la respuesta ante una hipotética situación de riesgo químico.
El ejercicio en cuestión se trataba de gestionar un vertido de químicos tras una colisión entre buques, donde han tenido que coordinarse la Capitanía Marítima, Bombers de la Generalitat, Bombers del Parc Químic de Seguretat, Protecció Civil, los ayuntamientos de la zona y el personal de seguridad de las concesiones químicas.
El puerto de Tarragona ha calificado los resultados del ejercicio de “éxito rotundo” tras las conclusiones a las que ha llegado el equipo técnico.
Cómo prevenir accidentes químicos
Los profesionales coinciden en la importancia de la “preparación, coordinación y gestión de recursos como elementos cruciales en la gestión eficiente de situaciones críticas” como la que se ha planteado. Todos ellos han ejecutado la supuesta operación exitosamente gracias a “una coordinación sin fisuras”.
El ejercicio, en tratarse de un hipotético caso de vertidos contaminantes, se enmarca dentro del proyecto internacional IRA-MAR, que pretende mejorar la respuesta integrada frente a situaciones de contaminación, accidentes marítimos y peligros químicos en el área portuaria.
De este modo, con este tipo de simulacros, se mejora la preparación y la respuesta frente a accidentes de estas características, a la vez que evalúa posibles desencadenantes.
Durante la maniobra, los equipos han trabajado la comunicación y los canales de comunicación de emergencia, los planes que deben activarse, la constitución del órgano de coordinación, el relacionamiento con los medios de comunicación, la evaluación de los riesgos del producto vertido, actuaciones específicas de respuesta y tiempo dedicado para cada una de ellas, el estudio estructural de los buques implicados y la gestión del personal, entre otros aspectos.