El puerto de Barcelona anticipa con antelación las actuaciones para reducir el impacto medioambiental que se producirá como consecuencia de la construcción de su futuro nodo ferroviario. Una de estas obras es la construcción de una pantalla acústica y visual para proteger las zonas de nidificación de la gaviota de Audouin -denominada también gaviota corsa – y del cuervo marino establecidas en la isla del Molí, situada cerca de la desembocadura del río Llobregat. Esta pantalla sellará esta zona protegida del espacio Nou Llobregat, donde se construirán las terminales ferroviarias A y B de expedición/recepción que conformarán el citado nudo ferroviario de la infraestructura catalana.
En la presentación de la pantalla acústica este miércoles, el presidente del puerto de Barcelona, Damià Calvet, ha señalado que esta infraestructura es “la primera pieza de la zona del Nou Llobregat”.

Asimismo, el presidente del puerto de Barcelona ha destacado en su intervención que esta obra “es un ejemplo más del cuidado con que el puerto está realizando todas las obras y actuaciones en el territorio y demuestra que el crecimiento de la actividad logística es compatible con la preservación del medio natural y la biodiversidad”.
La obra de la pantalla acústica está sujeta a los Mecanismos de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea, y está incluida en la Delimitación de Espacios y Usos Portuarios (DEUP) ampliado del puerto de Barcelona que incorpora las obras asociadas a los accesos ferroviarios. Es decir, es una actuación que forma parte del futuro nodo ferroviario del puerto de Barcelona, que incluye los nuevos accesos viarios y ferroviarios y las seis terminales ferroviarias previstas.

La pantalla está formada por placas de hormigón prefabricadas, de 4,9 metros de altura y un grosor de entre 25 y 65 centímetros, que se han colocado sobre una fundamentación en U que se apoya en micropilotos de 10 metros de profundidad, en la mota de protección del margen izquierda del último tramo del río Llobregat. El hormigón de las placas está colorido y con un relieve que conforma las palabras “Riu Llobregat”. La pantalla, de 244 metros de longitud, ha sido proyectada por el estudio Jansana, de la Villa, De Paauw Arquitectes y construida por la UTE Protección Acústica (Dragados-Geocisa) por un importe de 1.177.117 euros, sin IVA.
El objetivo de la pantalla es proteger las colonias de gaviota corsa y de cuervo marino que se establecen en la isla del Molí y lo usan para zona de nidificación segura del ruido y el impacto visual que provocará el paso regular de convoyes ferroviarios una vez se hayan ejecutado las obras de los nuevos accesos. La construcción de la pantalla se ha realizado simultáneamente a una actuación de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) en este mismo espacio: la acumulación de sedimentos aportados por el río había convertido la isla en una península y la ACA ha procedido a su retirada para que las aves vuelvan a percibirla como una zona segura para la nidificación.