El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Bilbao se ha decantado por adjudicar a Petronor, filial del grupo Repsol, el concurso para el otorgamiento de la última parcela libre de la zona industrial del Puerto de Bilbao, en el Abra Exterior. Se trata de una superficie de 46.700 metros cuadrados, en Punta Sollana, y se dedicará a la puesta en marcha de un proyecto de “marcado carácter estratégico, de alcance global y referencia mundial”. El proyecto, que competía en concurso público con otros dos, está vinculado a la innovación y la sostenibilidad medioambiental, contribuyendo a la reducción de emisiones de CO2 y al desarrollo de la economía de hidrógeno en torno al Puerto de Bilbao como núcleo neurálgico.
Proyecto innovador y sostenible
Tal y como anunció el pasado junio el Consejero Delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, el proyecto ganador consiste en la construcción de una de las mayores plantas mundiales de producción de combustibles sintéticos a partir de hidrógeno verde, generado con energía renovable. La principal característica de estos combustibles es que se producen con agua y CO2 como única materia prima, pudiendo utilizarse en motores de combustión de coches, camiones o aviones, así como otras aplicaciones.

En una primera fase la inversión ascenderá a 67 millones de euros, con la previsión de que estas instalaciones se encuentren operativas a partir de 2024. La instalación será referente en Europa por la tecnología puntera aplicada y por el uso del CO2 capturado en la cercana refinería. Combinará el hidrógeno verde −energía 100% limpia al ser generada a partir de fuentes renovables− con el CO2 como materia prima en el proceso, y situará a Repsol a la vanguardia del desarrollo de los combustibles de cero emisiones netas.
En una primera fase, escalable a una posterior etapa comercial en función de los resultados, se obtendrán 50 barriles al día de combustible sintético, con “cero emisiones” netas de CO2 en todo su ciclo productivo. Este año ya se empezará con la ingeniería conceptual del proyecto. Petronor es la única refinería de la Península Ibérica y una de las pocas de Europa que ha integrado procesos de captura, almacenamiento y uso del CO2 y está previsto que pueda realizar captura directa del aire.
Planta de pirólisis
Las Fases II y III, que se ubicarán junto a la primera, supondrán una inversión adicional de 76 millones de euros, consistiendo en una planta de generación de gas para consumo de la propia refinería a partir de residuos urbanos, como papel, cartón, plástico y textiles, lo que evitará utilizar combustibles tradicionales y propiciará la economía circular. Inicialmente esta planta de pirolisis podrá procesar alrededor de 10.000 toneladas al año de residuos urbanos, cifra que puede ascender a 100.000 toneladas en fases posteriores.

Última parcela de suelo industrial
Los 46.700 metros cuadrados adjudicados en Punta Sollana corresponden a la última parcela libre de la zona industrial del Puerto de Bilbao, en el Abra Exterior. El proyecto de Petronor competía en concurso público con otros dos proyectos presentados por DBA Bilbao Port y Tepsa, más relacionados con el almacenamiento de combustibles. En el plan de DBA se preveía multiplicar por 5 la capacidad de almacenamiento de energías renovables e hidrocarburos en el puerto de Bilbao y crear un centro estratégico de almacenamiento de alta capacidad en el Arco Atlántico Europeo para operadores nacionales e internacionales, con la previsión de llegadas de grandes buques de hasta 300 metros de eslora y 100.000 toneladas.

Apuesta de Repsol
La propuesta finalmente seleccionada se vincula con aspectos como la innovación,
la tecnología puntera, la sostenibilidad, la descarbonización y la transición
energética que contribuye a la reducción de la huella de carbono, criterios que
se alinean con la estrategia de la propia Autoridad Portuaria de hacer del puerto
de Bilbao un espacio más sostenible e innovador. Asimismo, se ha tenido en
consideración, entre otras cuestiones, la alta inversión confirmada, la viabilidad
técnica, económica y operativa del proyecto, y la generación de empleo.
Se trata de una decidida apuesta de Repsol por Euskadi, teniendo cuenta lo que supone una empresa como Petronor para el empleo y la riqueza del entorno. Con un potencial productivo de 12 millones de toneladas/año, es la mayor refinería de España y exporta algo más de un tercio de su producción. Cuenta con una plantilla de cerca de 1.000 trabajadores y genera un empleo inducido de 6.200 personas.