El puerto de Pasaia se prepara para la recuperación en el segundo semestre

En el actual contexto de crisis sanitaria, que se ha traducido en una ralentización –cuando no paralización- de la economía, los puertos reflejan una vez más su carácter de “termómetro”. En las próximas semanas y meses se comenzará a ver el impacto real en los tráficos de mercancías –recordar aquí que el tránsito de personas está restringido- con bajadas aún por cuantificar.

Las autoridades portuarias ya están planificando el escenario más allá de la crisis derivada del coronavirus, Covid-19. Entre ellas, el puerto de Pasaia aprovecha la presentación de sus relativamente buenos datos de tráficos del primer trimestre para elevar la vista hacia el segundo semestre del año como ocasión para “recuperar una parte significativa del volumen perdido, a medida que se produce la mejora de esta coyuntura negativa que vivimos” según explica el presidente de la Autoridad Portuaria, Felix Garciandía.

Eficacia y seguridad

El puerto de Pasaia, sus empresas y trabajadores, están desarrollando con “eficacia y seguridad”, su misión como actividad esencial para Gipuzkoa y los sectores estratégicos  a los que sirve de apoyo en su cadena logística. Tal como señala su presidente, Félix Garciandía, “no ha sido fácil, ya que, al reto de un mercado muy tensionado, todos hemos tenido que adaptar también la organización interna en un tiempo récord”.

El puerto de Pasaia mantiene su actividad en el año que presenta su proyecto de transformación

Al cierre del primer trimestre de 2020, con un total acumulado de 772.756 toneladas, el tráfico del puerto de Pasaia apenas ha bajado un 2,5% en el total de mercancías. En el contexto general de descenso en el tráfico de mercancías en el conjunto del sistema estatal de puertos, se puede considerar que esta bajada se puede considerar como “un reflejo del buen trabajo” que se está desarrollando “a pesar de la complicada coyuntura de las últimas fechas, tanto desde el punto de vista comercial como operativo”. 

Según el presidente Garciandía, el desempeño de un puerto “no puede analizarse desde lo anecdótico de un tráfico ocasional, ni el dato de un mes” sino que debe considerar sobre todo la evolución, con cierta perspectiva, de sus segmentos de negocio.

Desde esa perspectiva, la siderurgia, el automóvil, el sector papelero o el sector agroalimentario mantienen su volumen en el acumulado del primer trimestre. No es el caso de los graneles sólidos como la chatarra, la madera o los cereales, que en total suponen un descenso de 20.000 toneladas sobre el total acumulado de casi 780.000 toneladas

Tras un prometedor inicio de año, con un incremento en enero del 4,59%, las importaciones y exportaciones se han retraído en marzo, un mes que muestra un descenso mayor, en particular respecto a los productos siderúrgicos y la automoción, a medida que su actividad se ralentiza o paraliza.

Tráficos del puerto de Pasaia en el mes de marzo

Un futuro mejor

Según el presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia, para los próximos meses, esperamos que esta tendencia se mantenga, junto con un descenso de la importación con destino a actividades que hoy en día están paralizadas o han reducido su actividad, ya sea por cuestiones operativas (seguridad ante el Covid-19) o por problemas de demanda. Una de las víctimas de la actual situación ha sido el Festival Marítimo de Pasaia, la segunda edición de una cita exitosa que estaba programada para los días 28 de mayo al 1 de junio y que ya no se celebrará.

Sin embargo, a más largo plazo, el objetivo para el próximo semestre es recuperar una parte significativa del volumen perdido, a medida que se produce la mejora de esta coyuntura negativa que vivimos. En este sentido, el puerto “seguirá siendo fundamental” para la actividad económica y tiene un “compromiso claro” con la recuperación económica por la que habrá que pelear una vez pase la alerta sanitaria. De acuerdo con los datos disponibles (2017/2018), una media de un tercio (33%) del volumen en toneladas del total importado y exportado de Gipuzkoa se hace por vía marítima. De este total, casi la mitad, el 47% es a través del puerto de Pasaia. Caber recordar que los sectores estratégicos, tanto para la economía regional como para el movimiento portuario, son el siderúrgico, automoción, pesca, papel, químico, materiales de construcción y agroalimentario.

Inversiones y planificación: 50 millones

Félix Garciandía recuerda que en el negocio portuario, primero hay que planificar e invertir, para que luego a través del ciclo de inversión-crecimiento, generar las infraestructuras y la conectividad/intermodalidad que permitan el desarrollo de los tráficos y la inversión privada.

Félix Garciandía, presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia

En este sentido, a principios de año 2020, el puerto presentó su proyecto de transformación de la dársena “para dar respuesta” al reto de incrementar su capacidad para ampliar el horario de entrada y salida de buques -reduciendo las restricciones de marea y de visibilidad-, y mejorar la capacidad de atraque, calado y maniobrabilidad con buques de mayor eslora, todo ello imprescindible para garantizar el futuro del Puerto. Este proyecto cuenta con un presupuesto para los próximos seis años de casi 24 millones de euros.

La Autoridad Portuaria se ha preparado este último año para liderar en el Puerto un ambicioso proyecto de transformación”

A este presupuesto plurianual, hay que añadir la ejecución en año y medio de otros seis millones para la habilitación de los últimos 10.000 metros cuadrados que quedan pendientes de pavimentar en la zona de antigua Central Térmica. Un presupuesto similar absorberá la puesta en marcha de  la nueva conectividad ferroviaria, imprescindible para la logística del automóvil. Además, Pasaia tiene en marcha dos obras de capital importancia: de un lado la construcción de 7.000 metros cuadrados de almacenes en La Herrera, y la finalización de la lonja de pesca, una muy importante actividad económica y que arrastra un notable retraso en su ejecución. Según Garciandía, el presupuesto total supondrá una inversión próxima a los 50 millones de euros, “una inversión vital para el propio Puerto y para contribuir a una recuperación más rápida de la actividad económica de Gipuzkoa”.

El presidente de Pasaia confía en que las restricciones presupuestarias que se prevén por parte del Estado, no influyan en las inversiones ya acordadas y que los distintos Fondos previstos, no se vean intervenidos.

Medidas de apoyo

La Autoridad Portuaria de Pasaia ha puesto en marcha una serie de medidas de apoyo a empresas y usuarios de la instalación, pero, además, en los próximos días se va a proponer la Consejo de Administración  y aprobar un amplio conjunto de medidas para apoyar a la comunidad portuaria en su más amplio sentido. Estas medidas “van a permitir atenuar el impacto negativo de las obligaciones de pago” que tienen que soportar las empresas y “flexibilizar” determinadas obligaciones del ámbito portuario.

Garciandía aprovecha también para lanzar un mensaje de ánimo al decir que “todos juntos venceremos a la amenaza del Coronavirus y habrá que darlo todo para volver a recuperar el crecimiento económico y el empleo. El puerto, sus empresas y trabajadores estarán ahí”, aportando su trabajo, invirtiendo, generando empleo y  apoyando la competitividad empresarial. También agradece a la generalidad de los actores presentes en el puerto su “generosidad” y la puesta a disposición, más allá de carencias puntuales, como las que se han dado en la lonja o la escasez de EPIs que se han visto solventadas con esfuerzo, trabajo y la buena disposición de las partes. Como ejemplo, la Guardia Civil ha puesto a disposición sus mascarillas para el personal portuario y el control de las medidas sanitarias en la lonja, el levantamiento de restricciones al transporte por carretera o el esfuerzo realizado por los Prácticos, entre otros agentes que desarrollan su actividad en torno al puerto.

“La Autoridad Portuaria se ha preparado este último año para liderar en el Puerto ese ambicioso proyecto de transformación” finaliza el presidente Garciandía.