Aurelio Martínez, presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), ha participado en el webinar organizado por la Fundación Valenciaport «Impacto de los puertos en su entorno socioeconómico», un encuentro que ha seguido un número importante de usuarios y en el que también ha intervenido Jorge Durán, Jefe de la Secretaría de la Comisión Interamericana de Puertos (CIP-OEA).
En primer lugar, Aurelio Martínez ha comentado la necesidad que tienen los puertos de especializarse y el peso del transporte marítimo en España. “Valencia se ha especializado en contenedores, cada puerto se especializa en lo que tiene ventaja comparativa o materia prima cercana o demanda creciente de sus industrias limítrofes”.
“En España el comercio exterior vía marítima supone el 67 por ciento en términos de toneladas y el 36 por ciento en términos de valor. Nosotros tenemos unas relaciones comerciales muy intensas con la Unión Europea y esto en un porcentaje muy alto se hace por ferrocarril y por camión. En cualquier caso, los productos más pesados se hacen a través de los puertos.”
Respecto a lo que puede suceder los próximos meses, Martínez ha apuntado que las estimaciones de los organismos internacionales suelen ser conservadoras y tratan de no inyectar más pesimismo en la opinión pública.
“Hay un gran debate de si va a ser o no una recuperación rápida,y ello va a depender de las ayudas que incorporemos rápidamente al proceso productivo para evitar que caiga la demanda efectiva, porque si cae podrían cerrar las empresas, así como las ayudas a las empresas para que puedan sobrevivir en este periodo complicado”.
Martínez ha apuntado que España contaba antes del coronavirus con un aparato productivo muy competitivo, por lo que considera imprescindible para salir de la actual mantener en la medida de lo posible esta competitividad, siendo este el mayor reto al que se enfrentan los gobiernos de países como España.
En cuanto al puerto de Valencia, Aurelio Martínez ha señalado que se trata de un puerto en el que el tráfico de contenedores representa un 80 por ciento del total (el ejercicio 2019 se cerró con un movimiento de 5.400.000 contenedores).
“Somos el quinto puerto en Europa y estamos en el puerto 27 a nivel mundial en un ranking que dominan los puertos asiáticos y chinos. Una ventaja de Valencia respecto a otros y que explica su crecimiento es que en la línea que viene desde Asia hacia Gibraltar y que se dirige al norte de Europa, Valencia es la desviación más pequeña en un puerto que, además, genera una gran cantidad de carga”.

“Los tráficos que van a la costa este de Estados Unidos, muchos de ellos pasan por Valencia, de hecho, es el primer país con el que mantenemos un mayor número de relaciones comerciales”.
Para Martínez, todo ello permite al puerto de Valencia tener unos índices de conectividad marítima muy elevada superior a la alemana o italiana, a lo que hay que unir la cercanía con Madrid. “Todo ello nos permite tener una posición privilegiada dentro de España”.
Impacto económico de los puertos
El actual presidente de la APV ha expuesto que los puertos generan tanto impactos positivos como negativos dentro del enclave en el que se sitúan. Si bien por una parte los puertos son capaces de generar empleo, también es necesario tener en cuenta que los puertos son consumidores intensivos de suelo, generando un importante impacto medioambiental y provocando congestión en el tráfico de las ciudades, entre otros aspectos.
“Con la automatización creciente los puertos cada vez generamos menos empleo, por lo que ese efecto visible del empleo se va a diluir con el tiempo. Tampoco tenemos empresas españolas importantes y quizá no veremos ese efecto positivo de manera directa en la economía local”.
Martínez también ha incidido en la idea de que algunos de los efectos positivos de un puerto se extienden en una área muy amplia que alcanza a otras regiones, en el caso de Valencia por ejemplo, a zonas como Madrid. Sin embargo, los costes se concentran en el área cercana del propio puerto (demanda de suelo,congestión, ruido, etc).
Otros de los factores importantes de los puertos es la conectividad que los mismos pueden ofrecer, una cuestión importante que se ha dado en Valencia y que se traduce en la reducción de los costes de las empresas exportadoras, convirtiendo al puerto en un foco de atracción de empresas y en un eje de generación de empleo.
En este último aspecto, el puerto de Valencia genera (según la metodología empleada por el puerto y que ofrece resultados aproximados) 7.303 empleos solo en la comunidad portuaria, más otros 16.368 empleos directos (estibadores, transportistas, etc), 3.815 indirectos y 11.380 inducidos. Los datos expuestos suman un total de 38.866 empleos, el 2,09 por ciento de toda la Comunidad Valenciana, una cantidad que podría ampliarse a 44.000 cuando esté lista la nueva terminal, “siendo además unos salarios que están por encima de la media”.
Entre estos empleos, un 24,2 por ciento se genera en el entorno directo del puerto (en una distancia inferior a los 2 kilómetros), lo que es un indicador de que el puerto influye positivamente en su zona más próxima.