“Este año 2019 no ha sido ni bueno ni malo para el sector transitario, sino que más bien lo definiría como un año de transición en el que los resultados económicos del presente ejercicio serán más bien discretos. En otras palabras, si en algún caso hay beneficios, éstos no serán para echar las campanas al vuelo”, manifiesta Emilio Sanz, presidente de ATEIA Barcelona.
“El crecimiento continuado en economía no existe ya que más tarde o más temprano ésta tiende a estabilizarse como está ocurriendo en la actualidad. Las razones que conducen a la estabilización pueden ser muchas y por variadas causas y puestos a analizar la situación actual podríamos señalar como culpables entre otros: la desaceleración (o estancamiento de su continuado crecimiento) de la economía china, la incertidumbre creada por el Brexit o la impredecible y errática política económica propiciada por el actual presidente de los Estados Unidos quien parece disfrutar sembrando la duda en los mercados internacionales”, explica Sanz.
“Insisto, la situación que estamos padeciendo actualmente es provocada por una ‘desaceleración’ de la economía a nivel mundial y no, por una ‘recesión’ que nos plantearía un escenario mucho más serio y más preocupante para nuestro futuro inmediato”, recalca Sanz.
Para el presidente de ATEIA Barcelona, “la desaceleración económica se produce por las tensiones comerciales internacionales a las que hacía referencia en la respuesta anterior y también por un menor crecimiento mundial debido a un descenso de las exportaciones y a una menor demanda interna en los países industrializados y esas son básicamente las razones principales que me llevan a pensar que el próximo año 2020 no cambiará mucho con respecto al presente para nuestro sector transitario”.
“Podría ser peor si la situación fuera de recesión en lugar de desaceleración, ya que si este fuera el caso deberíamos prepararnos para vivir en un escenario bastante más problemático y durante un periodo más prolongado de tiempo y que, según mi criterio, iría bastante más allá del 2020”, continúa Sanz.
En definitiva, termina el presidente de la Asociación de Transitarios de Barcelona, “pienso que el año 2020 será más o menos igual que el presente para nosotros los transitarios y solo en el 2021 podríamos retornar a los tiempos más alentadores vividos estos últimos años”.