Sick, el fabricante de sensores y soluciones de sensores para la automatización de fábricas, logística y de procesos, con sede en Waldkirch (Alemania) ha conseguido unos resultados positivos en el difícil año fiscal del 2022, con un volumen de pedidos de 2.511 millones de euros y una facturación récord de 2.190 millones de euros. De esta manera, se han batido nuevas marcas a la vez que se confirma la gran demanda de sensores inteligentes para la digitalización industrial. El resultado antes de intereses e impuestos fue de 165 millones de euros y la situación general financiera y de beneficios de la compañía demuestra solidez.
El volumen de ventas creció en todas las regiones del mundo de forma equilibrada y también el personal aumentó en todos los países en un 8 por ciento para llegar a 11.909 colaboradores de Sick. La compañía ha invertido como siempre en su potencial de innovación y ha vuelto a presentar más de 100 patentes en el 2022, de las que más de la mitad pertenecen al ámbito del software y de los sensores apoyados por la IA.
Una situación financiera ocasionada por la guerra en Ucrania, problemas en las cadenas de suministro, inflación, subida de precios de la energía y las materias primas, así como las restricciones por el Covid (sobre todo en China) fueron los causantes de una situación financiera complicada en el 2022. Sick declaró como máxima prioridad la capacidad de realizar entregas con fiabilidad y pudo así obtener un desarrollo de negocio positivo.
El volumen de ventas aumentó en un 11,5 por ciento para alcanzar los 2.190 millones de euros (1.964 millones en el 2021) y superó así no solamente los pronósticos, sino también y por primera vez la barrera de los dos mil millones. Además, los pedidos aumentaron en un 8,2 por ciento para situarse en 2.511 millones de euros (2.321 millones en el 2021). Después de un fuerte año fiscal en el 2021 caracterizado especialmente por los efectos de la recuperación tras la pandemia, el margen de BAII en el 2022 alcanzó la sólida cifra del 7,5 por ciento de facturación (un 10,3 por ciento en el 2021). De esta forma, el resultado antes de intereses e impuestos alcanzó los 165 millones de euros y, con una reducción con respecto al año anterior del 18,6 por ciento, los resultados del grupo rondan los 120 millones de euros (148 millones en el 2021). El fuerte aumento de los precios de los materiales (+17,3 %) y de los demás gastos operativos (+32,2 %) debidos a las compras en el mercado al contado, unido al alza de los gastos de transporte y a los gastos adicionales en desarrollo, han perjudicado la cifra de BAII.