Fabricantes y logísticos del automóvil negociarán garantías de volúmenes mínimos y costes

La Association of European Vehicle Logistics (ECG) ha acogido con satisfacción el diálogo abierto sobre la manera de abordar la escasez de capacidad en la logística de vehículos terminados. Este inicio de negociaciones se entabló entre los fabricantes de automóviles y los operadores en una reunión previa a la celebración del 25º aniversario de la ECG, mantenida en Bruselas el 28 de junio. 

La considerable disminución de la producción en el 2021 y el 2022, “sin garantías por parte de los fabricantes de automóviles, ha acarreado una importante reducción de la capacidad del sector y una falta de confianza en los volúmenes futuros”, señala la plataforma del sector de la logística de automóviles.  La ECG ya venía avisando de este peligro: “Desde principios del 2020, no ha habido tregua para los operadores. El Covid-19 y la escasez de materiales generaron tanta incertidumbre que la inversión se frenó. Además, el vertiginoso aumento de la inflación y los costes de explotación ha provocado que muchos transportistas hayan operado con pérdidas durante buena parte de este tiempo”.

No tiene ningún sentido producir coches si no hay nadie que pueda transportarlos”, apuntó uno de los representantes de los fabricantes de automóviles durante la reunión, lo que obtuvo el consenso de los demás participantes.

Ahora, los fabricantes de automóviles se muestran abiertos a debatir con sus proveedores posibles soluciones para restablecer la confianza y restituir las capacidades. Para la ECG, las cláusulas sobre garantías de volúmenes mínimos y tasas de inflación, entre otras cosas, constituyen un paso indispensable para conseguirlo. Esto también tiene que ir acompañado de métodos de previsión adecuados que permitan una planificación eficiente y sostenible.

Wolfgang Göbel, presidente de la ECG, señaló “Las garantías sobre los volúmenes y los ajustes a la inflación son fundamentales, sin embargo, no va a ser posible restablecer la capacidad en un abrir y cerrar de ojos”. Los plazos de producción de los activos de la industria son todavía muy largos. Como mínimo 12-18 meses para un camión nuevo y 4-5 años para los nuevos buques. Además, el transporte por carretera está sufriendo una escasez crónica de conductores que se ha visto agravada por la guerra. “Un diálogo abierto permitirá a los proveedores abordar retos comunes bilateralmente con los clientes”, prosiguió Göbel.

La Association of European Vehicle Logistics (ECG) celebró en Bruselas un encuentro con fabricantes de automóviles

Mike Sturgeon, director ejecutivo de la asociación empresarial, destacó que, en toda Europa, los miembros de la ECG que explotan camiones portavehículos habían reducido el tamaño de sus parques automovilísticos, a menudo hasta en un 30-40 por ciento. Además, en su mayor parte, estas reducciones desembocan en el desguace de los portavehículos más antiguos, lo que significa que la capacidad se ha reducido completamente en detrimento de la industria. “Aunque la confianza se restableciera de un día para otro en el momento en que los volúmenes empiecen a recuperarse, es muy probable que la demanda supere a la oferta durante unos cuantos años debido a los largos plazos de producción para el abastecimiento de camiones y a la enorme escasez de conductores”, detalló Sturgeon.

Tras esta reunión, la ECG elaborará y publicará un índice europeo que indique los principales parámetros y costes para los distintos modos of transporte de la industria y los servicios clave prestados por los operadores en este sector.