La conexión ferroviaria entre Cantabria y Bilbao ha sido el argumento central del discurso del presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, con motivo de la celebración del 41 aniversario del Estatuto de Autonomía.
Para Revilla “el tren rápido con Bilbao es en estos momentos el gran objetivo pendiente” de la Comunidad Autónoma, toda vez que la conexión ferroviaria con Madrid, que avanza en su ejecución, es ya una «realidad irreversible. Esa será la gran obra que transformará absolutamente Cantabria», señaló el presidente de Cantabria.
Este tren conectará Santander con Bilbao en aproximadamente una hora, con paradas en Laredo y Castro, y supondrá un «salto cualitativo y cuantitativo» en la conexión de la Comunidad Autónoma con Europa y el Valle del Ebro, señaló el mandatario de Polaciones antes de recordar que “el proyecto cuenta con el apoyo del Gobierno de España”, tal y como han hecho público en sucesivas ocasiones el presidente Pedro Sánchez, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y, esta misma semana, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños.
En cuanto al aniversario del Estatuto, el jefe del Ejecutivo cántabro se ha referido, por un lado, a los avances en educación, sanidad e infraestructuras a lo largo de estos 41 años y, por otro lado, a la «buena imagen» de Cantabria en el resto de España. En su opinión, la autonomía de Cantabria «ya no tiene vuelta atrás» y está «absolutamente consolidada» entre los cántabros, especialmente, entre los más jóvenes.
El acto ha puesto fin al programa diseñado para conmemorar el 40 aniversario del Estatuto de Autonomía, que ha incluido, entre otras actividades, una serie de debates sobre la evolución de la economía, la cultura, la ciencia, el deporte, la comunicación o la presencia de la mujer en las instituciones, visitas institucionales, actuaciones folclóricas y un documental sobre la autonomía.
