El puerto de Castellón se ha vestido de gala para la toma de posesión oficial de su nuevo presidente, Rubén Ibáñez, en un acto en el que ha estado acompañado por las autoridades autonómicas y portuarias.
En su discurso, Ibañez se ha mostrado emocionado, al recordar a su familia, y agradecido, señalando al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, diciendo que “he tenido el privilegio de poder trabajar contigo un tiempo, y se del interés que tienes por mejorar la vida y la situación de la provincia de Castellón”.
También tuvo palabras de agradecimiento para el presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, por las facilidades prestadas, “por tu amabilidad, ayuda y consejos durante estos 50 días que llevo de travesía”. Dapena ha devuelto el saludo y ha señalado que el puerto de Castellón se encuentra en el «top 10 del sistema portuario español», añadiendo que queda por desarrollar la infraestructura portuaria “por el lado tierra”.

Entre otros agradecimientos, el presidente del puerto de Castellón se acordó de la alcaldesa de Castelló, Begoña Carrasco, quien se mostró dispuesta a colaborar “codo con codo” con el puerto de Castellón; y a la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina.
Otros invitados relevantes que acudieron al acto protocolario fueron los presidentes de las Autoridades Portuarias de Alicante, Luis Rodríguez, y Valencia, Mar Chao, y a anteriores presidentes del puerto de Castellón, como lo fueron Rafa Simó y Francisco Toledo, entre otros.
Situación anómala
Rubén Ibáñez dijo que la situación general «no es buena» y que las incertidumbres han propiciado “una caída ostensible de la actividad económica” y una bajada “sustancial” de los tráficos marítimos. En este contexto, “la situación global de Europa, y de España en particular, tienen un impacto bastante relevante en nuestra cuenta de resultados”.
No obstante, Ibañez confía en disponer de “un espacio para la oportunidad, y eso es lo que hay que explorar», anunciando que la primera gran acción para explorar nuevos retos, es creer en las «inmensas posibilidades, desde la unidad de acción» de la comunidad portuaria junto a la Autoridad Portuaria.
El presidente Ibáñez ha apuntado como “objetivo prioritario» crecer en tráficos marítimos y fortalecer la zona de concesiones, y se ha comprometido a aportar capacidad de trabajo, liderazgo en la gestión y sentido de pertenencia.

Colaboración y liderazgo
Según dijo, «creo en la necesidad de unir sinergias”, de optimizar recursos, y la “obligación de prestar un buen servicio», porque «las inversiones son enemigas de los tiempos y las esperas», poniendo así la “alfombra roja a “todo el que quiera venir al puerto de Castellón, es bienvenido”.
También ha apuntado la necesidad de liderar bajo un prisma profesional todas las acciones que se realicen, haciendo mención a los crecimientos internos del puerto y el acceso sur ferroviario, “dos palancas donde deben pivotar los nuevos retos como puerto», sin olvidarse el mencionar el futuro desarrollo de Parc Castelló, con 1,6 millones de metros cuadrados logísticos disponibles junto a la estación intermodal.

Defensa del sector cerámico
Ibáñez señaló que «el puerto de Castellón es el puerto que ve nacer la fabricación de un azulejo, y debe ser el puerto que vea salir el producto terminado. La cerámica es para la provincia lo que el puerto debe ser para la cerámica”, sentenció.
En este sentido abogó por la “defensa a ultranza de nuestro sector cerámico”, que podría hacer crecer del 35% al 85% los posibles tráficos portuarios “si la inmensa mayoría del sector productivo de la provincia operara por este puerto”. Finalmente, abogó por un mayor entendimiento puerto-ciudad en beneficio de todos.