¿Hidrogenoficción o necesidad?

Rafa Martín
Exconsultor en Aprendizaje

El hidrógeno está de moda y la movilidad aplaude contenta. El nuevo invento se llama Alpha 2.0 y es una bici capaz de hacer entre 130 y 150 kms y recargar en dos minutos, la francesa Pragma Industries es la responsable del arte-facto. Su motor eléctrico de 250 W se alimenta mediante una pila de combustible PEM de 150 W que trabaja a la limón con una batería de litio de 150 Wh, una solución tecnológica basada en el hidrógeno muy parecida a las que utilizan los coches como el Toyota Mirai o el Hyundai Nexo.

Así que a 25 km/h y capaz de subir pendientes considerables gracias a sus 90 Nm, esta bicicleta te llevará fuera de tu provincia, seguro. Pesa 32 kilos y subirla a casa no parece lo más recomendable, pero su autonomía supera a la de un buen puñado de los actuales coches eléctricos en el mercado actual, aunque el precio también pesa lo suyo: casi 7.000 eurazos.

Si el principal problema que tienen los vehículos impulsados por hidrógeno es el suministro, que sepas, que en el mes de enero de este 2021, ya se ha inaugurado en Madrid, la primera hidrogenera, capaz de recargar un vehículo de a 700 bares de presión. Ah, de hidrógeno verde, es decir obtenido mediante fuentes renovables, como debe ser.

La iniciativa, liderada por Toyota, se completa con un consorcio de empresas energéticas españolas (Enagás, Urbaser, Carburos Metálicos, Sumitomo Corporation España y la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio) y se unirá a pocas estaciones, de uso privado, y con una presión limitada a 350 bares, justo la mitad que esta nueva que será capaz de suministrar hasta 10 kg/día de hidrógeno con una pureza del 98,98% y recargar un automóvil en menos de 5 minutos para rodar otros 600 km. Aunque en España solo hay un Mirai, propiedad de Toyota, en el mundo circulan ya más de 11.000, especialmente en Alemania, Estados Unidos, Japón o Corea del Sur que tienen ya una buena red de estaciones de servicio para suministrar hidrógeno a alta presión.

Si te gusta la bici, pero vives en Barcelona, te parecera que no te dá, así que Pragma Alpha se ha inventado un sistema autonómo que te permitirá recargar su tanque de hidrógeno en cualquier lugar: unos sobres de polvos reactivos que generan una reacción química para recargar la pila de combustible. Su contenido, inocuo y biodegradable, te permitirá hacer 100 km por el precio de 5 euros/sobre, es decir unos 0,05 euros/km mientras esperas que vayan llegando hidrogeneras, porque Toyota no esta sola, Hyundai, Mercedes y Honda, entre otras que andan enredadas en que esta fuente de energía se convierta en algo más que testimonial y acabe completando el mix energético del futuro sostenible.

Está por ver si España que, especialmente en el Sur, tiene un potencial enorme para producir energía solar, además de eólica, se sumará a la producción de un hidrógeno que le permitiría almacenar esta energía y aprovechar todo ese potencial que incipientemente se está fomentando.

Agua no va a faltar, y emprendedores tampoco, al menos eso demuestra el proyecto que desde el Consorcio del Hidrógeno Renovable (CH2R) están intentando impulsar para que el río Ebro sea la fuente para suministrar agua y, mediante fotovoltaica, descomponerla para obtener hidrógeno verde por un tubo.

Habrá que ver si las grandes empresas se suman a esta iniciativa y podemos beber de los Innovation Found de la UE, una de las fuentes de financiación más importantes del mundo mundial para el desarrollo de tecnologías innovadoras de reducción de las emisiones de carbono. Pese a su reciente constitución, el CH2R ha logrado ya elaborar un proyecto de hidrógeno distribuido ubicado en Barcelona, reuniendo agencias tecnológicas, administración, empresas privadas y asociaciones gremiales.

Pese a todo, parece que no alcanzó suficiente músculo privado, pero, aprovechando el know how y los intereses comunes que deberían sintonizar en sinergia,  el Consorcio vuelve a la carga para tocarla de nuevo en la próxima e inminente convocatoria a estos Fondos de Innovación Europeos y componer una pionera red de distribución de hidrogeno verde.

Esta sinfonía de infraestructuras configuraría un Valle del hidrógeno (H2Valley Barcelona), con almacenamiento, hidrogeneras, una red de transporte y de nodos territoriales complementada con una red de distribución en larga distancia, más de 1.000 kms, a través de ferrocarril. El proyecto contempla una hidrogenera en TMB y la implementación de Hydrogen Corridors, en el Mediterráneo y en el Ebro, como ejes de estos corredores verdes para personas y mercancías. ¿Te suena bien?, ¿Quién sabe si alguien se arrepentirá luego de no salir en la foto ahora? ¿Quién sabe? dentro de poco lo mismo podemos alcanzar Madrid en bici.