Para reducir el impacto del turismo de cruceros en los puertos de destino, el sector se esfuerza por ser un modelo de negocio rentable, sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
La adaptación de las navieras de cruceros a los protocolos del Covid
Apenas unos meses después de que los cruceros reanudaran la navegación, los casos de Covid-19 empezaron a dispararse y los cruceros reforzaron efectivamente sus protocolos de coronavirus, que incluyen la obligación de vacunarse, la realización de pruebas diagnósticas y la obligación del uso de mascarillas.
Las compañías de cruceros, deseosas de deshacerse de su temprana reputación de portadoras flotantes de enfermedades, se esforzaron por instituir protocolos de Covid-19 bastante rigurosos a bordo; las autoridades establecieron guías para realizar pruebas a la tripulación y a los pasajeros, y cómo hacer frente a los brotes. La mayoría de las navieras de cruceros también instituyeron mandatos de vacunación y exigieron que todos los pasajeros, incluidos los niños en el caso de algunas navieras, que estuvieran completamente vacunados (lo que significa dos dosis de Pfizer o Moderna, una dosis de Johnson & Johnson, o un equivalente aprobado por la OMS).
Las tasas de vacunación a bordo de los cruceros se acercan al 95% para los pasajeros y los miembros de la tripulación y algunas compañías de cruceros han comenzado a exigir vacunas de refuerzo. Los pasajeros y la tripulación han sido sometidos a pruebas de PCR o de antígenos antes de subir al buque, y las líneas de cruceros han educado claramente tanto a la tripulación como a los pasajeros para que identifiquen e informen de los síntomas del Covid-19. Los miembros de la tripulación suelen someterse a pruebas rutinarias a lo largo del viaje y los pasajeros pueden tener que someterse a pruebas antes de cualquier excursión en tierra si el puerto de escala lo requiere. Las líneas de cruceros han tenido éxito en el rastreo de contactos estrechos y a menudo han ido más allá de los requisitos de las autoridades, instalando tecnología de purificación del aire o incluso laboratorios de pruebas PCR a bordo. Las compañías navieras han trabajado estrechamente con cada destino para el desembarco de los casos positivos, con planes específicos de alojamiento, transporte y hospitalización.
En resumen, los cruceros se han reanudado con éxito con medidas sanitarias de primer orden que les ha permitido mitigar el riesgo del Covid-19 eficazmente entre los pasajeros de los cruceros, los miembros de la tripulación y los destinos, ya que la salud y la seguridad de todos ellos siguen siendo la máxima prioridad del sector.
La colaboración de las compañías con las ciudades para reducir los efectos del turismo de cruceros
En las últimas décadas, el turismo de cruceros ha experimentado un impresionante crecimiento tanto en número de pasajeros como en destinos. El turismo de cruceros genera una importante contribución a las economías de los países y puertos, que se percibe como mayor que la de los turistas que llegan en avión u otros medios de transporte. Hoy en día, los cruceros ofrecen un mundo de instalaciones y servicios innovadores que pretenden satisfacer las expectativas de una población de viajeros cada vez mayor. El sector de los cruceros ha respondido a los deseos de los pasajeros desarrollando nuevos destinos y diseños de buques más grandes.
Para reducir el impacto del turismo de cruceros en los puertos de destino debido a este crecimiento, el sector se esfuerza por ser un modelo de negocio rentable, sostenible y respetuoso con el medio ambiente. En términos de sostenibilidad, el sector de los cruceros se esfuerza por responder a los retos medioambientales a los que se enfrenta, reforzando las políticas y prácticas de gestión de residuos, la política de tratamiento del agua y la reducción de las emisiones atmosféricas y adopta buenas prácticas sostenibles: se incrementan los cruceros impulsados por gas natural licuado (GNL), solo viable para cruceros de nueva construcción. El uso de GNL reduce entre un 85-95% las emisiones de óxidos de nitrógeno y azufre.
Se suman otras iniciativas sostenibles, como la conexión de electricidad a tierra, con el objetivo de que los motores se puedan apagar cuando están en el puerto, y así ayudar a impulsar la eficiencia energética y reducir la huella de carbono. Las navieras están realizando inversiones para que sus buques se puedan conectar a la red eléctrica cuando están atracados. Existen numerosas colaboraciones entre navieras, puertos y autoridades locales para incrementar la disponibilidad de estas conexiones. El 35% de la flota de cruceros en servicio dispone ya de la tecnología necesaria para conectarse a la red eléctrica en los 14 puertos del mundo donde se ofrece esta opción.
El sector de los cruceros es una arteria vital para las economías locales y nacionales de todo el mundo, apoyando 1,17 millones de puestos de trabajo.
Más del 69% de la capacidad mundial de cruceros utiliza EGCS (sistema de depuración de gases de escape) que elimina el 98% del contenido de azufre de los gases de escape y reduce significativamente las partículas. El 100% de los nuevos buques contarán con sistemas avanzados de tratamiento de aguas residuales (AWTS por sus siglas en inglés) Por otro lado, el Gobierno balear con el fin de asegurar la sostenibilidad del destino está trabajando en la regulación y reorganización de buques en el puerto de Palma con las navieras para fomentar el turismo responsable. Existe un compromiso por las partes de intentar colaborar en ese proceso y llegar a una reorganización de las escalas anuales.

El impacto de esta actividad en las economías (Ref.: informe CLIA-junio 2020)
El sector de los cruceros es una arteria vital para las economías locales y nacionales de todo el mundo, apoyando 1,17 millones de puestos de trabajo que abarcan una amplia variedad de sectores, incluyendo la hostelería, la aviación, la agricultura, el comercio minorista, el ocio, la fabricación, los servicios de información, la salud y, por supuesto, el turismo. A nivel mundial, el sector de los cruceros genera más de 150.000 millones de dólares de actividad económica cada año. Apoyando los citados 1,17 millones de puestos de trabajo que pagan más de 50.000 millones de dólares en sueldos y salarios.
Las contribuciones económicas consisten en los gastos directos de las compañías de cruceros, así como el dinero gastado en tierra por los pasajeros y tripulantes. Algunos ejemplos de gastos en tierra son excursiones, compras de souvenirs y otras compras al por menor, así como los viajes previos y posteriores al crucero, billetes de avión, transporte terrestre y hoteles.
Comparado con el 2019, los datos económicos del 2020 reflejan el gran impacto de la pandemia en la amplia comunidad de la industria de cruceros y pone en relieve la importancia de este tipo de turismo para las economías alrededor del mundo: 5,8 millones de embarques de pasajeros (-81%). 576.000 puestos de trabajo (-51%). 63,4 mil millones de dólares de contribución económica total (-59%).
El expectante horizonte de futuro de este negocio
Han sido tiempos difíciles para el sector del turismo, y quizás ningún sector lo ha sentido más desde el comienzo de la pandemia que el de los cruceros, pero las perspectivas son buenas para el futuro. La tímida demanda inicial ya ha provocado un enorme aumento de las reservas en el 2022 y el 2023 de cruceristas que han visto cancelados o retrasados sus viajes a causa de la pandemia, así como nuevas reservas de personas que prevén que los cruceros volverán a ser más seguros que nunca.
Los rigurosos protocolos implementados por la industria están permitiendo la reactivación de la actividad de cruceros a nivel mundial, lo que supone la recuperación de empleos y la revitalización de las economías locales y nacionales.
La industria de cruceros tiene la oportunidad de liderar el turismo sostenible
La mayoría de los nuevos cruceros se centran en las últimas tecnologías y esfuerzos en materia de sostenibilidad, que es muy importante tanto para las navieras como para sus pasajeros. Los viajeros de hoy en día son más conscientes de los complejos problemas climáticos a los que se enfrenta nuestro planeta, por lo que la pandemia ha acelerado la tendencia del viajero consciente. Muchos más viajeros están eligiendo su compañía de viajes o cruceros en función de su actitud y sus compromisos con la sostenibilidad.
Los viajeros de hoy en día son más conscientes de los complejos problemas climáticos a los que se enfrenta nuestro planeta, por lo que la pandemia ha acelerado la tendencia del viajero consciente. Muchos más viajeros están eligiendo su compañía de viajes o cruceros en función de su actitud y sus compromisos con la sostenibilidad.
Los armadores buscan formas de reducir el impacto que los buques tienen en el medio ambiente. Los constructores navales están buscando formas de transformar los buques y formas de renovar sus líneas existentes y hacerlas más seguras y respetuosas con los viajeros y con todo el planeta al mismo tiempo. La industria de cruceros se ha comprometido a ser neutra en carbono en el 2050, y en ese sentido, será fundamental avanzar en el uso de fuentes de energía todavía más limpias como el hidrógeno y optimizar todos los consumos a bordo, tanto en iluminación como aire acondicionado, cocinas, y por supuesto, en propulsión. No cabe duda de que el compromiso del sector de los cruceros con el medio ambiente es firme.