La novena edición del Foro Marítimo Deusto, celebrada en Bilbao este jueves, ha centrado sus debates en la parte empresarial del negocio marítimo, más que en el tema académico, con tres ponencias de gran altura que consolidan a este evento en el calendario de citas de obligada asistencia y reflejando la importancia esencial que tiene la industria marítima en el tablero geopolítico actual.

Como aliciente adicional se hizo entrega de los premios al mejor expediente académico de los cursos 2020-21 y 2021-22 que en esta ocasión recayeron en Alexandra Badra -ausente- y Ane Támara. La entrega simbólica del premio, dotado con 1.000 euros, corrió a cargo del presidente del Propeller Club del País Vasco-Port of Bilbao, José Luis Grijalvo, y el Gerardo Tiedemann, anterior presidente y socio fundador del Club.
Se trata de la tercera entrega de premios tras las ediciones del 2019, cuando resultó ganadora Iranzu Sedano, y la doble edición del año pasado, correspondiente a los años 2020 y 2021 premiando a Javier Ponte y María Otero. El patrocinio de estos premiso por parte del Propeller Club del País Vasco-Port of Bilbao se sustentan en su política de apoyar el conocimiento, y en el convenio suscrito con la Escuela de Administración Marítima del Gobierno Vasco, acuerdo que premia con una cantidad económica al mejor expediente académico y Trabajo Fin de Máster, un aliciente más para los estudiantes.
Imbricación en la ciudad de Bilbao
La decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de Deusto, Gema Tomás, y el director del Master en Gestión de Empresas Marítimo Portuarias y Derecho Marítimo, Javier Larena, fueron los encargados de presentar la jornada y los ponentes. En su alocución, Tomás destacó la fuerte conexión de Bilbao con el ámbito marítimo, un entorno en el que la Universidad de Deusto también ha jugado su papel de imbricación sectorial. Es a partir de la creación de la Escuela de Administración Marítima, en 1982, cuando ambas instituciones han ido estrechando lazos de colaboración.

En este sentido, el Master ofrece un tipo de formación muy especial, al aunar los estudios de Derecho con los de Gestión de empresas marítimo portuarias, una originalidad que ha demostrado su éxito por la demanda de alumnos llegados desde diversos países más allá de nuestras fronteras en el “marco globalizado” en el que nos encontramos.
En esta novena edición del Foro Marítimo Deusto se ha contado con la participación de tres expertos como son Charles Debattista, Adolfo Utor y Joel Grau, tres grandes expertos en sus materias correspondientes, quienes analizaron aspectos relevantes y de actualidad de la industria marítima. Para el acto de clausura se pudo contar con la intervención del director de Puertos y Asuntos Marítimos del Gobierno Vasco, Aitor Etxebarria.
Tres temas de actualidad
Charles Debattista, una autoridad en lo referido a los Conocimientos de Embarque (B/L) como a las Pólizas de Fletamento se reencontró con algunos de los alumnos de las primeras ediciones del Master, hoy día figuras destacadas del sector marítimo tras 38 años, como Luis Gabiola, Felipe Castaño o el propio Joel Grau, otro de los ponentes de la jornada.

Debattista asesora desde hace décadas a las navieras más dominantes, a gobiernos e instituciones clave, así como a los mayores fletadores del sector marítimo. Del mismo modo, es una figura clave en los Arbitrajes más relevantes de la industria desde hace más de 20 años, donde atesora un papel principal no sólo ante las instituciones de referencia del mercado, sino en las jurisdicciones más variadas y determinantes.
En su ponencia “Arbitraje marítimo y de materias primas en Londres: quién, cómo y por qué”, Charles Debattista señaló las ventajas de la Corte de Arbitraje -de Londres en su caso- sobre la jurisdicción ordinaria, como son su mayor agilidad, menor coste económico y con la ventaja de que las partes pueden elegir al árbitro de mutuo acuerdo. Las estadísticas señalan que el éxito del arbitraje es muy alto, con pocas reclamaciones por vía legal ordinaria, que resulta un proceso mucho más caro y farragoso.
Existen dos modalidades reconocidas por la ICC: el arbitraje institucional y el “hecho a medida”. El primero se beneficia de una visión más global, con reglas fijas basadas en una plataforma consolidada de conocimientos, si bien la “ad hoc” es más personalizada.
Explicó los méritos que son necesarios para convertirse en “árbitro” como una profesión relacionada con el medio (abogados, armadores, brokers, Clubs de P&I, capitanes…), ser aceptados por la institución y disponer de conocimientos reconocidos y estar familiarizado con el cuerpo legal marítimo. No obstante, según Debattista, también son importantes las habilidades de escucha, empatía, rigor y una expresión escrita aceptable.

Baleària, una compañía con alma
La segunda ponencia corrió a cargo de Adolfo Utor, presidente de Baleària, primer naviero nacional con una expansión internacional extraordinaria, y versó sobre cuestiones de actualidad en el sector. Utor está considerado un pionero en la industria marítima en la búsqueda constante y el uso real de medios de propulsión alternativos en la moderna gran flota de Baleària, aspectos indispensables a la altura de los retos medio ambientales en liza.
Utor dijo que su compañía es “una anomalía” en el sector marítimo pues su objetivo final es la “creación y fomento de valores humanos”, para ser “una compañía con alma”, con una misión que permita “la cohesión de los equipos” enfocados en un fin aglutinador. Señaló que Baleària es una empresa con valores, responsable, ética y rentable. Su fin último es mejorar las rutas marítimas, abrir nuevas rutas y construir barcos, todo ello con el objetivo de desarrollar el progreso social.
El presidente de Baleària señala que la sostenibilidad de la flota es sumamente importante, además de la innovación y la solvencia, como piezas maestras de su compañía. Vincula el desarrollo económico a la existencia de los ferris y por ello se marca el reto de ampliar sus rutas en el Norte de África y el Caribe, lugares de amplias posibilidades, no exentas de problemas.
Adolfo Utor reclamó el papel de “cliente” no de los puertos, sino de los agentes que en ellos operan y dijo que “los puertos son un medio y no un fin en sí mismos”, no están para generar beneficio, sino para ayudar el desarrollo económico de sus entornos. En este sentido, Utor hizo hincapié en que el sector es intensivo en inversión de capital cuyo retorno es a largo plazo, por lo que reivindicó el papel del empresario para afrontar los retos del futuro más cercano: digitalización, Blockchain, inteligencia artificial y otras tecnologías disruptivas que sirvan para crear valor. Y en este mundo cambiante “la confianza es el activo más importante de las empresas”.

Finalmente, Joel Grau, COO de Hizone Group en Shanghai, se extendió en una conferencia titulada “¿Super ciclo en shipping? Análisis del mercado y potenciales escenarios. Disrupciones en rutas comerciales y el papel esencial de los traders como fletadores y carriers”. Grau, quien ya intervino en la pasada edición de este mismo Foro, es un referente en la industria marítima por su dilatada carrera profesional en plazas como Panamá, Golfo Pérsico o Suiza, donde ha desempeñado altos cargos directivos en firmas de primer nivel como Clarksons y JP Morgan. Licenciado por la Universidad de Deusto, Joel Grau compagina la dirección del holding marítimo empresarial con una extensa labor divulgativa como conferenciante y profesor universitario por todo el planeta.