Miembros del Propeller Club del País Vasco–Bilbao Port han celebrado una nueva jornada lúdica, un encuentro dedicado al disfrute de sus socios, sin programar la habitual charla técnica, pero sin renunciar al trabajo en red. Se trata de la tercera vez que el club reúne a sus miembros tras la pandemia para una jornada sin otras pretensiones que estrechar los lazos entre sus miembros.
En el 2021 los miembros del Propeller Club del País Vasco–Bilbao Port visitaron el estadio de San Mamés, hogar del Athletic Club, mientras que el año pasado la jornada consistió en un desplazamiento para realizar una visita guiada a las bodegas Eguren Ugarte, situadas en Laguardia, localidad de Rioja Alavesa.
En esta ocasión, la jornada consistió en un desplazamiento para realizar una visita al frontón Jai-Alai de Gernika (Bizkaia), considerado la catedral de la modalidad de “cesta punta”, una emocionante y vibrante variedad del juego de pelota en frontón.
En el Jai-Alai se realizó una visita guiada a las instalaciones, seguida de un partido de exhibición a 4, por parejas, y una prueba personal de juego de cesta para los miembros voluntarios del Club Propeller. Tras la visita, se celebró el tradicional almuerzo de hermandad en un excelente restaurante de la localidad de Forua. Una vez más, se recordó a los miembros desaparecidos en los diez años desde la creación del Propeller Club del País Vasco–Bilbao Port, puesto que la comunidad aún se muestra impactada por el fallecimiento de José Luis Trueba, quien convocó un brindis en su honor, en un ambiente emocionante y emocionado, antes de la despedida durante dos meses, que dará lugar a un nuevo encuentro en el mes de septiembre.