La dualidad salud y economía, retos para el otoño vasco

La protección de la salud, controlando la transmisión de la Covid-19 dentro de lo posible, y la reactivación de la economía son los retos del otoño para las instituciones vascas. Las advertencias del Departamento de Salud, avisando de la inminente llegada de una “segunda ola de contagios”, debe ser compatible con la actividad económica que, en julio ha visto un repunte del empleo de algo más de 1.000 personas.

El apoyo al sector industrial “es fundamental para la reactivación de la economía y la recuperación del empleo” según la Cámara de Comercio de Bilbao, quien señala que “el sector exterior es el otro factor clave en el proceso de regeneración”. Señalan que “tenemos que apoyarnos en nuestros mercados tradicionales” como Francia, Alemania, Gran Bretaña o EEUU, y al mismo tiempo potenciar el acceso a nuevos países con perspectivas de futuro y nuevas oportunidades en Asia o Latinoamérica. Sin embargo, el efecto epidemia supondrá “un reto para la exportación” sin ferias sectoriales ni viajes comerciales.

La industria y el comercio exterior seguirán siendo piezas fundamentales para la recuperación económica

Para el 2020 el programa de promoción internacional de las Cámaras Vascas incluye 8 misiones comerciales a Marruecos, México, Omán-Qatar, Rusia, Colombia, Sudáfrica-Kenia-Uganda, Indonesia y Egipto. Algunas serán en modo virtual y otras en modo presencial, siempre que la situación lo permita. Y, por otro lado, la labor cameral se centrará en apoyar a las empresas que desean iniciarse en la exportación y aquellas otras que quieren afianzar su estrategia internacional.

Nekane Murga y Arantxa Tapia, dos caras de la misma moneda

Disminución de flujos comerciales

Las guerras comerciales y el Brexit tendrán un impacto económico negativo porque aumentarán los aranceles a los productos que perjudican a las pequeñas empresas. Una economía global debe buscar nuevos escenarios de cooperación y desarrollo, apoyar a los países más necesitados, aprovechar la interconexión entre países, apostar por un mercado único, salvaguardar el comercio internacional y las cadenas de suministro, establecer sistemas de producción y distribución eficaces para garantizar las necesidades de la estructura social y económica.

Acuerdos entre las partes

Por su parte, y ante la gravedad de la situación económica, la Consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, hace un llamamiento a “trabajar de la mano”  y en llegar a acuerdos entre empresarios, empleados y administración, para entender la flexibilidad en una visión general, en la mala situación actual y en la buena situación futura. “Necesitamos fortalecer las herramientas de apoyo, especialmente para proteger a las pequeñas empresas” señala Tapie para quien “también están surgiendo nuevas oportunidades y debemos aprovecharlas”.