Adif avanza en el proyecto de transformación de la plataforma multimodal de La Llagosta (Barcelona), un nodo logístico estratégico clave para impulsar el tráfico ferroviario de mercancías por ferrocarril y el desarrollo del Corredor Mediterráneo en Catalunya.
La compañía ha iniciado el proceso de licitación del suministro y transporte de los aparatos de vía destinados a la conexión en ancho estándar con el Corredor Mediterráneo, por cerca de 8 millones de euros y un plazo de ejecución de 24 meses.
Este contrato proveerá 27 desvíos o semiescapes de ancho mixto para vía sobre balasto y otros 3 convencionales en ancho estándar, así como 4 aparatos de dilatación de alta velocidad (1 de carrera 1.000 mm y dos de carrera 500 mm en ancho ibérico o estándar).
Junto a la fabricación, premontaje, comprobación en taller y transporte, el contrato incluye el asesoramiento durante la fase de colocación en vía, nivelación y alineación y las operaciones de ajuste finales para su integración en el enclavamiento definitivo o su puesta en servicio.
85 millones de euros movilizados
Con este contrato, las inversiones que Adif ha destinado a este proyecto se elevan a 85 millones de euros: 59,6 millones corresponden a la adjudicación de actuaciones de plataforma, vía y electrificación y 17,4 millones de euros al contrato de ejecución de nuevas instalaciones de seguridad y comunicaciones.
El centro logístico de La Llagosta, situado a 15 km de Barcelona, se configura como un nodo plenamente interoperable y de alta capacidad, que impulsará el transporte ferroviario en un área de gran potencial socioeconómico, como es el eje mediterráneo y su área de influencia.
La instalación está inmersa en un proceso de transformación integral que la adaptará a los estándares europeos de mercancías, transformándolo en un centro multimodal mediante el ancho mixto. Así, se convertirá en un enclave estratégico en el Norte de Barcelona y un referente para la gestión de trenes de mercancías de 740 m, la longitud estándar interoperable y compatible con las redes ferroviarias europeas.
El nuevo centro logístico, que enlazará con la Línea de Alta Velocidad (LAV) Barcelona-Frontera francesa y conectará en ancho internacional con el Corredor Mediterráneo, contribuirá de manera decisiva a los objetivos de este eje de comunicaciones. Dotando a su vez al transporte de mayor eficiencia, una significativa reducción de las emisiones contaminantes, una reducción de los costes en la explotación ferroviaria, mayores prestaciones de eficacia y fiabilidad para las circulaciones ferroviarias -incluida su plena compatibilidad con otras redes ferroviarias europeas- y tiempos de viaje más competitivos.
La futura configuración de la terminal la dotará de una nueva playa de vías de recepción/expedición integrada por vías paralelas con longitudes superiores a 750 m, montadas en ancho mixto y electrificadas a 3.000 V. Además, estará formada por un haz de 4 vías para la carga y descarga de UTI (Unidades de Transporte Intermodal) y otra vía para la carga y descarga de mercancía general.
Asimismo, abordará la remodelación de los accesos a la terminal, mediante la conexión en ancho estándar con el Corredor Mediterráneo desde el viaducto de la LAV Barcelona-Frontera francesa, la adaptación al ancho mixto entre la plataforma de La Llagosta y la línea El Papiol-Mollet y la conexión sur con la red de Cercanías. Además, se construirán varias losas de transferencia y almacenamiento de UTI con una extensión aproximada de 12 hectáreas.