El año que ahora termina no ha sido muy diferente a los anteriores para el Grupo Sparber, según comenta Jimmy Jaber, presidente de Sparber Líneas Marítimas y socio fundador del grupo transitario con más solera en Bilbao, “un año bueno que nos obliga a superarnos”. Se han realizado operaciones de importancia en Latinoamérica, Estados Unidos y África, principalmente, incrementando “considerablemente” el número de contenedores de exportación.
La parte más importante del negocio, los transportes terrestres, especiales y la carga marítima convencional, se mantiene, así como el servicio de consolidado y grupaje marítimo -a pesar de la gran competencia de los consolidadores especializados-, a unos 25 destinos en Sudamérica y un tráfico muy importante de consolidado desde Turquía. Además es reseñable el volumen tanto de importación como de exportación, “incluso cargas de proyecto”, con Israel.
En su faceta más de promoción, el Grupo Sparber procura asistir a las ferias sectoriales importantes, a veces con stand propio o bien acompañando a Uniport. Esto les ha servido para ampliar su base de clientes y proveedores, para tomar contacto directo con su red de agentes en el mundo, pero también para obtener un punto de vista más global ante las incertidumbres en el comercio internacional. Por ejemplo, frente al Brexit, “un mal avisado”, han tomado las medidas pertinentes para evitar problemas a sus clientes, guiándoles en los nuevos procesos que se han de implementar. Además la especialización de las diversas divisiones de Sparber en mercados “con cierta complicación” permite afrontar con ciertas garantías las dificultades que las guerras comerciales, actuales y futuras, puedan crear.
«LA INCERTIDUMBRE, PEOR QUE LA GUERRA»
Para Jimmy Jaber, “es peor la incertidumbre que la propia guerra comercial”, ya que se paralizan las inversiones, las decisiones empresariales. En su momento, las actuales tiranteces se resolverán, en un sentido u otro, pero nacerán nuevas situaciones de conflicto. Sparber, como grupo de empresas con su propia especialización, también apoya la toma de decisiones de sus clientes, orientándoles a las mejores soluciones en términos de coste logístico.
En el futuro, y el 2020 lo es, la incertidumbre antes mencionada “se despejará, para bien o para mal” y algunos de los transitarios “van a sufrir con ello” pues la logística va a experimentar grandes transformaciones. Se hace necesario pues, aplicarse en lo que solicitan los clientes en cuanto a digitalización, industria y logística 4.0, modernización y automatización de procesos…
En el caso del Grupo Sparber, y con los deberes ya hechos a nivel interno y externo, con los propios clientes, “vemos el 2020 con gran optimismo y mucha ilusión” porque entre sus previsiones está la consecución de grandes contratos de transporte terrestre, marítimo y aéreo.
Entre las amenazas para el sector, sobre todo para las empresas pequeñas, está la expansión de los grandes transitarios internacionales, que van ocupando cada vez más parte del negocio, pero también la “integración vertical. Las navieras van creando sus propias transitarias, sus propios transportistas” y dejan poco espacio a los transitarios más pequeños. Por su parte, Sparber prosigue con su “crecimiento natural”, siempre atento a las nuevas oportunidades en el mercado y a las necesidades que le trasladan sus clientes.