La World Shipping Council (WSC) y la European Shipping Council han acordado que de cara al mes de noviembre organizará un foro donde se relacionarán cargadores y navieras, con el objetivo de intentar establecer las bases para mejorar las relaciones, tal y como ha explicado Jordi Espín, secretario general de Transprime Shippers’ Council, en declaraciones para El Canal Marítimo y Logístico en el marco de BNEW Logistics.
Jordi Espín también ha moderado el debate “Reglamentación del transporte logístico-marítimo: sostenibilidad e igualdad de condiciones” en la primera jornada de la Barcelona New Economy Week (BNEW), donde han participado John Butler, presidente de la World Shipping Council (WSC) y Christa Sys, profesora de economía marítima de la Universidad de Amberes.
Butler, al ser preguntado por cómo se encuentra el transporte marítimo después de la pandemia, recalca que los problemas están repartidos a lo largo de todo el mundo de igual manera y atribuye a la pandemia toda la problemática en la que esta involucrado el sector.
Por lo que respecta a los elevados fletes que encontramos a día de hoy en el transporte marítimo, el presidente de la WSC ha recalcado que las navieras no son las únicas que fijan los precios y que existen muchos transitarios que lo hacen de igual manera.
El presidente de WSC ha puesto especial interés en incidir en que ahora lo que se tiene que conservar es el talento del sector, factor que no ha ocurrido durante la pandemia.
Contenedores: el actor principal de toda esta crisis
Christa Sys, profesora de economía marítima de la Universidad de Amberes, ha señalado la importancia de que es necesario que exista una comunicación más fluida entre todos los agentes que componen la cadena logística.
En especial, Christa Sys recalca que hay buques y contenedores y todo depende en organizarse: “Hay capacidad, pero los contenedores vacíos están donde no deberían estar”; y concluye que “se necesitan más buques tal y como hizo MSC, fletando algunos buques”.
Tanto John Butler como Christa Sys han llegado a la conclusión de que la transparencia y la digitalización ayudarán a mejorar la relación entre navieras y transportistas.