La Agrupación para la Promoción del Puerto de Tarragona (APPORTT) participó el martes de esta semana en la Catalunya Hydrogen Week, que se celebra del 9 al 17 de noviembre en el Moll de Costa del recinto tarraconense. APPORTT organizó un networking y una mesa redonda sobre hidrógeno y descarbonización, en la que participaron diferentes representantes empresariales del sector energético e industrial, además de la Vall de l’Hidrogen y la APT.
El director de la Vall de l’Hidrogen de Catalunya, Isaac Justícia, explicó que “el puerto de Tarragona puede convertirse en un hub del hidrógeno referente en el Mediterráneo y Europa, y tiene la oportunidad de crear una cadena de valor del hidrógeno con el tejido industrial de su hinterland”. Justícia ha añadido que esto se puede conseguir con la descarbonización de los combustibles en los buques o en los ferrocarriles.
Por su parte, el director de la Escola Tècnica Superior de Ingeniería Química de la Universitat Rovira i Virgili, Ricard García, insistió en que “el contexto nos ha hecho darnos cuenta de que necesitamos soberanía en materia de energía”, e invitó a aprovechar la crisis energética derivada de la guerra de Ucrania para desarrollar la tecnología necesaria que permita esta transición: “Tarragona tiene muchos de los ingredientes porque es menos dependiente de los combustibles fósiles”.
Núria Sicart, directora financiera de L’Energètica, la empresa pública de energía de la Generalitat de Catalunya, destacó que el puerto de Tarragona “es un socio ideal para desarrollar proyectos relacionados con las energías renovables”. Además, puso en valor la iniciativa pública de Reus para el suministro de energía verde a los equipamientos municipales, un proyecto que se alimentará de la energía solar gracias a los Fondos Next Generation de la Unión Europea.
Además, el responsable de Seguridad Industrial del puerto de Tarragona, Xavier Quintana, incidió en el reto de “conseguir un ‘puerto verde’ y autosuficiente desde el punto de vista de consumo de energías renovables”, e invitó a las empresas a “invertir en renovables para generar una comunidad energética portuaria”. Asimismo, destacó el papel de la colaboración público-privada para producir energía renovable a un precio competitivo.