La amenaza del Brexit está promocionando la creación de nuevos espacios para el transporte marítimo y un incremento de las conexiones desde el continente con Irlanda. En este caso, la naviera BG Freight Line ha iniciado una conexión semanal entre el puerto de Dunkerque, en el norte de Francia, con Dublin y Cork, en Irlanda.
El servicio está atendido por tres buques, de 1.000 TEUs nominales, que desde esta semana tocan los Dunkerque los martes, Dublín los jueves y los sábados, Cork. La puesta en marcha de este servicio de Short Sea Shipping permite responder al fuerte incremento en la demanda ya que inluyen tomas para el transporte de contenedores reefer y de 45 pies, equivalentes a la carga de un camión.
Para el puerto francés, esta nueva línea supone un refuerzo en sus movimientos de tránsito en las grandes rutas oceánicas, mientras aumenta la conexión con un mercado de alto crecimiento potencial. Para el armador, BG Freight Line, presente desde hace una década en el mercado del transporte de corta distancia, supone aprovechar la reciente ampliación de la terminal de contenedores del puerto de Dunkerque y la adquisición de sus nuevas grúas pórtico, para incrementar su presencia en el mercado y ampliar su presencia en el entramado de líneas en el norte de Europa.
El armador holandés, que cuenta con una flota de 23 buques, movió el pasado año cerca de medio millón de contenedores, con más de cinco millones de toneladas, entre una treintena de puertos de Bélgica, Holanda, Irlanda, Gran Bretaña y Francia.