Plan vasco de recuperación económica y del empleo

El Consejo de Gobierno de Euskadi ha aprobado el Programa BERPIZTU para la reactivación económica y el empleo de Euskadi, que tiene como objetivo recuperar todo el empleo perdido y volver a situar la tasa de paro por debajo del 10%, proyectando la dinamización de 130.000 empleos. El Programa será remitido en breve al Parlamento y, según sus promotores, es la respuesta institucional vasca para afrontar la crisis económica provocada por la pandemia sanitaria; una respuesta propia que como base de partida contempla recursos presupuestarios propios, sin considerar posibles fondos adicionales europeos. Se contempla destinar 13.250 millones de euros, entre recursos presupuestarios y avales públicos.

Euskadi tiene la tasa de desempleo más baja (10,3%), por detrás de Navarra, y se sitúa seis puntos por debajo de la media estatal que es del 16,2%

El programa se estructura en dos ejes verticales: un primer eje de reactivación económica y un segundo eje de dinamización de empleo. Además, se incorpora un tercer eje transversal: La calidad del empleo y la igualdad de género.

“BERPIZTU es un programa abierto y flexible y una apuesta a cuatro años para transformar Euskadi. Para construir una Euskadi más verde, más digital y más inclusiva, en línea con la estrategia europea”, ha señalado el Portavoz del Gobierno Vasco y Consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria, quien ha comparecido, junto con la Consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia.

Dinamizar el mercado laboral

Según la Encuesta de Población Activa – EPA, la cifra de personas ocupadas en la CAV aumentó en 20.900 durante el tercer trimestre del año respecto a 2019 (+2,33). Pero, también se incrementó el número de desempleados en 15.700 (+17,4%), lo que se traduce en una tasa total de paro del 10,34% (106.200 personas). En Bizkaia es del 11,73% (62.000).

Las cifras reflejan los graves efectos de la pandemia en el empleo, aunque parece que se va normalizando el comportamiento de la población activa.

Las perspectivas para los próximos meses hablan de recesión con una caía del PIB español que supera el 14%, lo que sin duda pasará factura al mercado de trabajo. Incluso las últimas medidas de contención del virus van a condicionar la senda de la recuperación a medio plazo.

Según la Cámara de Comercio de Bilbao, “es básico el diálogo y el consenso político” para adoptar medidas y reformas que potencien la reconstrucción de los sectores más afectados por la epidemia, además de generar confianza en el tejido empresarial en un entorno de seguridad y cooperación público-privada.

En el caso del empleo hay que mejorar la eficacia de las políticas de contratación de los colectivos con mayores problemas: parados de larga duración, mayores de 45 años y jóvenes. Además, aproximar los programas formativos a las demandas y necesidades de las empresas e impulsar el emprendimiento para la puesta en marcha de nuevos negocios.