Ivan Jančárek: “La República Checa está interesada en la industria de alto valor añadido”

La llegada del año nuevo también supondrá el relevo en la presidencia de turno de la Unión Europea: la República Checa cederá el testigo a Suecia, encargada de gestionar las políticas en el viejo continente durante el primer semestre de 2023. Cabe recordar que en el segundo semestre será España quien tome el relevo, por lo que, desde hace un tiempo, la República Checa y nuestro país mantienen un contacto fluido, preparando con tiempo la transición entre administraciones.

La República Checa es la entrada a los mercados de Centroeuropa

En este contexto, el Embajador de la República Checa en Madrid, Ivan Jančárek, ha realizado un balance de la gestión de su país y también ha hablado de temas de interés bilateral. Con motivo de un viaje empresarial a Bilbao, en el que estuvo acompañado por Mikel Garteiz-goxeaskoa, -Cónsul Honorario de la República Checa, desde el despacho de Aiyon Abogados, cubriendo las necesidades de País Vasco y Navarra-, respondió a las preguntas de El Canal.

Una presidencia de éxito

Para Jančárek, la presidencia de su país, la segunda desde su incorporación a la UE, ha sido “bastante exitosa” frente al reto principal que ha supuesto la guerra de Ucrania, pero también en lo referido a dar respuesta a los desafíos como la seguridad energética y la competitividad en lo referido al cambio climático, la recuperación de la industria tras el Covid-19 y la revitalización y protección de los “valores democráticos”.

La República Checa ha conseguido en este mandato “reforzar la UE” y conseguir una Europa “más ágil, eficaz y reactiva” según Jančárek, poniendo como ejemplo las medidas que se han tomado para apoyar a Ucrania y también en sancionar a Rusia. En el otro punto de mayor interés, el relacionado con la seguridad energética, el embajador pone de manifiesto la fragilidad del mercado en Centroeuropa.

Las crisis de Ucrania y de la energía han marcado el semestre checo

Como logros del mandato checo de la Unión, menciona Jančárek la consecución de la estabilidad en el precio de la energía, el Plan de Ahorro Energético y la promoción de las energías renovables, removiendo los obstáculos burocráticos que existen en Europa para poner en marcha nuevos proyectos, avances que comenzará a dar sus frutos “a partir del año próximo”.

En suma, el reto a partir de ahora es mejorar la eficacia energética, ahorrar energía, bajar los precios y conseguir un “mercado único de las energías”. En este sentido, los países periféricos están conectados con los suministradores, pero no están conectados en otros mercados interiores. La República Checa ha apostado por la energía nuclear a largo plazo y adelanta la construcción de un nuevo reactor -que empezará a levantarse en 2025 y entrará en funcionamiento hacia 2035- que ayude al mix energético, que también incluye un mayor apoyo a las renovables, pero también otras instalaciones a futuro.

Referido a este nuevo mercado energético el embajador señala que “estamos al principio” de un camino en el que tienen cabida algunas nuevas tecnologías de futuro, como el hidrógeno “un valor añadido al mix”, pero que necesita bajar el coste de su versión “verde”, mediante “inversiones coordinadas” que refuercen un mercado único de cara un “objetivo común”.

Ivan Jančárek, durante su visita a Bilbao

Excelentes relaciones bilaterales

La relación entre España y la República Checa, que data de hace 30 años, es de amistad y también de excelentes relaciones comerciales. España es el décimo mayor mercado de su exportación, mientras que viceversa, Chequia es nuestro el vigésimo cliente, y las inversiones económicas se van equilibrando. Con motivo de la presidencia checa “hemos tenido un contacto muy activo” para preparar la futura presidencia española.

En lo referido a Euskadi, Jančárek señala que “ambas zonas son de las más industrializadas” de Europa, por lo que cuentan con “intereses comunes” como automoción, aeroespacial, informática, tecnologías de la información, etc., “industrias de alto valor añadido” en la que las empresas de ambos lados se complementan.

Euskadi y la República Checa están entre las zonas más industrializadas de Europa

Después del Covid-19, el comercio entre ambas partes se ha recuperado “en dos años” y son varios los sectores empresariales checos que están interesados en invertir en nuestro país. Por ello, el embajador Jančárek está convencido de que “son los empresarios los que toman la iniciativa” en el desarrollo económico y nuevas áreas de colaboración.

Logística de tránsito

Según el embajador Jančárek, dado su situación geográfica como país de tránsito, en Chequia se da una gran importancia a la logística y el transporte. Así se están construyendo algunos parques logísticos de magnitud y las conexiones terrestres son accesibles, con carreteras libres de peajes -aunque existe el pago por uso para camiones-. También se ofrecen oportunidades de futuro en el sector del ferrocarril, no sólo para los productores de material rodante, sino también para la explotación de las redes y servicios, donde ya se han llevado a cabo inversiones, como la de Renfe en la ferroviaria Leo Express.

En lo referido al transporte por mar, Ivan Jančárek recuerda que “Chequia es dueña de una parte del puerto de Hamburgo”, su salida al mar, y también dispone de una importante actividad en el transporte fluvial mediante barcazas, a través del río Elba (Labe en checo) que fluye hacia el Mar del Norte -en Cuxhaven-, después de pasar directamente por la ciudad de Hamburgo y recorrer 929 kilómetros navegables, siempre en función del calado. No obstante, ya Chequia no está interesada en la instalación de más industria pesada, sino la que está ligada a la industria del conocimiento.

Ivan Jančárek estuvo acompañado por el cónsul local, Mikel Garteiz-goxeaskoa

¿Por qué la República Checa?

A juicio de Ivan Jančárek, su país ofrece excelentes oportunidades para las inversiones y supone una entrada en el mercado centroeuropeo, con 100 millones de consumidores situados en un radio de 500 kilómetros, logísticamente accesibles con facilidad. Ofrece también una excelente calidad de vida, seguro, un interesante crecimiento económico, culturalmente interesante… “sólo nos falta el mar”, bromea el embajador.

La República Checa ofrece, además, ventajas y facilidades para la instalación de empresas, especialmente interesadas en las nuevas tecnologías, “la producción de más alto valor añadido”, basada en la ciencia y en la tecnología, puesto que ya no resulta interesante la producción de bajo precio. 

A modo de resumen, Ivan Jančárek muestra el orgullo checo por haber gestionado con éxito la crisis de Ucrania, haber conseguido la seguridad energética en Europa y haber fortalecido la unión política, sin descuidar el crecimiento económico, durante la presidencia de turno de la UE.