Hoy en día Barcelona es una infraestructura básica para el desarrollo de la economía nacional dando servicio a las empresas exportadoras e importadoras en un ámbito tan fundamental y estratégico como es el de la logística internacional
Un año más, la comunidad portuaria y logística de Barcelona se reunirá con motivo de su tradicional misión comercial. Este año toca el turno a Colombia. Desafortunadamente, el año 2020 va a estar marcado por la pandemia mundial originada por el Covid-19.
La aparición de este virus nos ha demostrado claramente lo globalizado que esta el mundo y lo rápido que se resienten las economías cuando hay restricciones de movilidad e impactos sociales de esta magnitud. Como no podía ser de otra forma, los efectos se han hecho notar de manera contundente en los intercambios comerciales y por descontado en el transporte internacional y en concreto en el tráfico marítimo-portuario de manera muy especial.
Es por ello que, a pesar de las dificultades, resulta especialmente importante en estos momentos centrar nuestros esfuerzos en la promoción de nuestro puerto y país. Es fundamental que insistamos en presentar Barcelona como el hub logístico-portuario que es. Transcurridas décadas de esfuerzos e inversiones públicas y privadas, tenemos hoy un puerto moderno, eficiente y competitivo. Un puerto que ha centrado su estrategia en desarrollar tráficos de alto valor añadido entre los que destacan las líneas marítimas regulares (contenedores, autopistas del mar), ciertos graneles líquidos y sólidos, los buques porta-coches (automoción) y los pasajeros (cruceros y ferries). Hoy en día Barcelona es una infraestructura básica para el desarrollo de la economía nacional dando servicio a las empresas exportadoras e importadoras en un ámbito tan fundamental y estratégico como es el de la logística internacional.
Más allá de la propia infraestructura física, un puerto para que funcione necesita una comunidad portuaria implicada, coordinada y profesional. Son muchas las profesiones y actividades que integran un puerto moderno y todas ellas han de poder servir eficientemente a sus clientes y desempeñar sus responsabilidades. Los agentes marítimos (consignatarios de buques) son parte de esta comunidad y representan a los armadores, navieros u operadores coordinando las escalas de sus buques y sirviendo de enlace con los usuarios finales del transporte. Como parte activa de la comunidad portuaria de Barcelona, los consignatarios hemos contribuido a impulsar nuestro puerto internacionalmente y a modernizarlo afrontando los retos de la digitalización (puerto sin papeles, proyecto europeo “single window”), seguimiento y compromiso con la calidad (Port Efficiency Network y otras certificaciones y registros), formación profesional especializada (cursos on-line organizados desde la asociación de consignatarios) y responsabilidad medio ambiental (IMO 2020 y otras regulaciones y procedimientos).
Los agentes marítimos estamos en el epicentro e impactados por muchas transformaciones: automatizaciones, aplicación de nuevas tecnologías, concentraciones empresariales y verticalizaciones, nuevos ejes comerciales, geo-política y proteccionismos, regulaciones sobre combustibles fósiles y contaminación medioambiental, etc.
Colombia representa una oportunidad perfecta para desarrollar esta misión comercial. Es una economía dinámica con la que tenemos importantes lazos culturales y comerciales. En el 2019 el tráfico en contenedores con Barcelona superó los 20.000 teus llenos con una gran variedad de productos. En nuestra exportación destacan mercancías como el papel, los químicos y la maquinaria; y en la importación los productos de alimentación y en concreto el café y las bebidas. También hay tráfico significativo en convencional o granel líquido. El puerto principal de estos intercambios en Colombia es Cartagena de Indias seguido de Buenaventura. Seguro que hay campo para crecer en estos intercambios y parte de ello pasa por un mejor conocimiento de las empresas y del potencial de Barcelona como plataforma logística capaz de ofrecer una logística que añade valor al producto y que permite que este llegue de manera eficiente a un amplio hinterland (Península Ibérica, Sur de Europa y Norte de África).
La misión será también una muy buena ocasión para compartir, aunque sea de manera virtual en muchos casos, experiencias e iniciativas de nuestro sector. Nuestra industria se está transformando rápidamente y hay que adaptarse a estos cambios por muy disruptivos que estos sean. Los agentes marítimos estamos en el epicentro e impactados por muchas de estas transformaciones: automatizaciones, aplicación de nuevas tecnologías, concentraciones empresariales y verticalizaciones, nuevos ejes comerciales, geo-política y proteccionismos, regulaciones sobre combustibles fósiles y contaminación medioambiental, etc.
Esperamos participar activamente y contribuir a que esta misión tan singular sea un éxito y sirva para promocionar nuestro puerto y estrechar lazos con nuestros colegas colombianos.