Durante la primera semana agosto, la terminal de Sevitrade del puerto de Sevilla procedió a una operativa especial con el embarque de unos transformadores eléctricos, con destino al puerto ruso de Rostov. Este project cargo ha sido uno de los más complejas que se ha realizado en el puerto interior andaluz, según explica Sevitrade.
En total se cargaron siete transformadores que llegaron en transportes especiales por carretera hasta la Terminal Portuaria Sevitrade Esclusa. A estos grandes aparatos, de 120 toneladas cada uno, le acompañaban 43 radiadores, 6 contenedores de 40 pies, 7 tanques y una veintena de cajas de accesorios.
La gestión y el embarque fue organizada por Seatrans Maritime, mientras que la manipulación portuaria y estiba por Sevitrade. Esta operativa, singular por las reducidas dimensiones del buque «Grand Light» (81 metros de eslora por 11 de manga) y la variedad de formas y pesos de la mercancía, fue posible gracias a dos potentes grúas del terminalista sevillano (de más de 80 metros de altura y 100 tons de capacidad de carga cada una) y “la excelente coordinación entre transitarios, estibadores, personal portuario y agentes marítimos”, remarca Sevitrade
Tras permanecer tres días en el muelle de la Esclusa, el buque “Gran Light” abandonó la dársena del río Guadalquivir rumbo al puerto de Rostov, al cual llegó tras cerca de dos semanas de navegación. Se completaba así una operativa entre dos puertos interiores.