El puerto de Tarragona y el Parc Subaquàtic de Tarragona llevaron a cabo un simulacro de rescate. El ejercicio consistió, previo aviso de los responsables de emergencias del Parc Subaquàtic de Tarragona, en la liberación de un buceador atrapado en el barco hundido “La Dragonera”. El buceador que simulaba ser la víctima fue liberado por el grupo de rescate especializado GRAE (Bombers de la Generalitat) y los GEAS (Grup Especialista d’Activitats Subaquàtiques).
El comienzo del ejercicio fue a las 9.00 horas de la mañana y finalizó alrededor de las 11.30 horas. El simulacro fue dirigido por el puerto de Tarragona con la colaboración de Capitanía Marítima y Salvamento Marítimo y coordinado por todos los equipos de emergencias implicados. El ejercicio permitió poner en funcionamiento el plan de emergencias de la Societat d’Exploracions Submarines de Tarragona (SUS) y su coordinación con el Plan de Autoprotección del Puerto de Tarragona (PAU). El inicio de la intervención empezó cuando, desde el Parc Subaquàtic de Tarragona, se dio la señal de alarma y el aviso al Centro de Mando Avanzado de la Policía Portuaria de Tarragona (CCA).
La coordinación entre equipos
A partir de este momento, se activó el PAU del Puerto de Tarragona a nivel 1, que consiste, en este caso, en la movilización del centro de mando avanzado y la activación de los protocolos de comunicación desde el CCA/CCS (Centro Control Salvamento), así como el desplazamiento al lugar de los hechos de los diferentes equipos de intervención y actuaciones.
Estos protocolos activaron los medios sanitarios de PrevenPort y de Activa Mutua, los Bombers de la Generalitat, los bomberos del Parc Químic, el Centro de Coordinación y Salvamento (CCS), la Capitanía Marítima, los Mossos d’Esquadra, el servicio marítimo de la GC, la Guardia Civil del puerto y la Policía Portuaria del Puerto de Tarragona, todos ellos desarrollando tareas de cooperación para resolver el incidente con las actuaciones más adecuadas y consensuadas.
Jornada de formación
En el ejercicio participaron unas 50 personas, miembros de los diferentes grupos de intervención. Una vez finalizada la intervención los grupos de intervención se reunieron en la sala de conferencias del puerto de Tarragona para llevar a cabo un briefing de simulacro con las principales conclusiones y propuestas de mejoras. Las personas implicadas estudiaron la coordinación y la revisión de los protocolos de cada una de las actuaciones así como el análisis de los procedimientos específicos de rescate.
La sesión de formación posterior al simulacro contó con la presencia del responsable de actuaciones de emergencias en medio submarino, Albert Pradillo, que lideró esta jornada técnica sobre riesgos específicos en las actividades subaquáticas, destacando la importancia de la coordinación de todos los agentes implicados en la resolución de una actividad de estas características.
Pradillo, médico traumatólogo y colaborador con Activa Mutua, habló sobre los diferentes niveles de riesgo en el buceo, los tipos de emergencias en que se pueden encontrar los y las profesionales, sobre la medicina específicamente subacuática y los tipos de accidentes. Pero sobre todo quiso destacar que el principal objetivo de una intervención es la de conservar la vida de la persona accidentada y al mismo tiempo la de las personas especializadas que actúan para apoyarle y resolución en el accidente.
Simulacro superado satisfactoriamente
Según declaraciones de los principales responsables del ejercicio, la efectividad de las medidas de actuación y los procedimientos específicos del rescate se resolvieron de forma satisfactoria, a pesar de que es importante establecer y escuchar nuevas propuestas de mejora.
Igual que otros simulacros que periódicamente se realizan en el puerto de Tarragona, el objetivo del ejercicio fue comprobar la eficacia de los protocolos de avisos y comunicación entre todos los grupos de actuación, su coordinación, el tiempo de respuesta y poner a prueba los procedimientos de activación del PAU del puerto de Tarragona.