Francia se lanza a por el talento joven para el sector marítimo

Todos los sectores económicos, y el marítimo en su más amplia acepción no es una excepción, se quejan de la dificultad para reclutar talento joven que haga posible un relevo generacional a corto y medio plazo.

El sector marítimo francés ha decidido lanzarse a la conquista de los nuevos profesionales y desde su Secretaría del Mar se ha puesto en marcha una campaña, titulada “La mar contrata”, con el fin de dar a conocer y promover la diversidad de la formación y las profesiones en el mar.

Hervé Berville: “El sector marítimo es una prioridad de Estado”

Tras una nueva reunión con personalidades comprometidas con la igualdad y la diversidad en el mundo marítimo, la Secretaría de Estado del Mar se moviliza para abrir horizontes profesionales marítimos, destacando profesiones exigentes y apasionantes y promoviendo la formación que conduce a ellas. Y todo para fortalecer el atractivo del sector marítimo y enfrentar el desafío de reclutamiento experimentado por varios de sus sectores.

Hasta finales del 2023 se recuerda que, si los océanos y las costas son lugares de ocio y relajación, también pueden ser lugares donde están surgiendo carreras profesionales. Hervé Berville sigue la hoja de ruta que el presidente Macron ha marcado para afianzar una política marítima sostenible y mostrar la fortaleza de este sector, animando a los profesionales marítimos en activo a difundir el mensaje y desarrollar el atractivo de estas profesiones.

La mar contrata

La campaña “La mar contrata”, pone de relieve todas las profesiones marítimas, desde las más emblemáticas hasta las menos conocidas.

Se hace mención de los subsectores de transporte marítimo y marina mercante; construcción naval, industria y mantenimiento; investigación del medio marino; energía renovable marina y, finalmente, pesca y acuicultura.

Como ejemplo, el sector de transporte marítimo y servicios asociados emplea a unos 12.500 marinos franceses, alrededor de 3.000 de otras nacionalidades y unos 8.500 empleados en tierra. Son sectores que “con los pies mojados o secos” forman parte de un mercado laboral muy dinámico de casi medio millón de empleados en su totalidad.

En este sentido, las instituciones francesas ofrecen muchos cursos de formación excelentes para los profesionales del mañana, desde aprender a operar un barco en un simulador de última generación, estudiar el medio marino, aprender sobre acuicultura o diseñar barcos de bajas emisiones.

La campaña anima a conocer las escuelas profesionales marítimas, la Escuela Marítima Nacional de Enseñanzas Superiores y los centros de formación autorizados, más de 60 en todo el país, instituciones de referencia para la formación marítima, tanto inicial como continua, y abren el camino a una amplia variedad de carreras.

El puente de mando de un buque es uno de los puestos más deseados, pero no el único

El proyecto comunicativo incluye desde posts en redes sociales, el medio preferido por los jóvenes, hasta charlas y conferencias, apoyado todo ello por material más convencional, como carteles, kits de comunicación y publicaciones dedicadas que ayudarán a los jóvenes, a sus padres y a la comunidad educativa, a conocer todo sobre la diversidad de los cursos ofrecidos y las profesiones a las que conducen.

De momento, se ha puesto en marcha una web con la descripción de los puestos, la orientación de los estudios -con sus requisitos específicos- y un selector de empleabilidad.

El secretario de Estado del Mar señala que “con un potencial de un millón de empleos para el 2030, la economía marítima ofrece ricas oportunidades y perspectivas profesionales”.

Desde los trabajos ancestrales practicados por los pescadores hasta las últimas tecnologías utilizadas por los ingenieros para descarbonizar los barcos, el sector marítimo presenta “un amplio abanico de profesiones y carreras”.

La modernización del sector marítimo y “el apoyo a la diversidad de nuestro tejido económico marítimo son, por lo tanto, el núcleo de las principales prioridades del Estado”, finaliza Berville.