El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Jose Luis Ábalos, y la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, han logrado un principio de acuerdo por el que se impulsan los asuntos de infraestructuras pendientes en la agenda vasca, entre los que destaca el desarrollo de la Y vasca.
El TAV vasco acumula importantes retrasos, “injustificados” según ha declarado la Consejera en más de una ocasión. La nueva sintonía ente gobiernos y el fin de la interinidad en Madrid propician el acuerdo para acelerar unas obras que se antojan interminables.
Como es sabido, el Gobierno Vasco ha sido el encargado de realizar la construcción de tramo guipuzcoano de la Y Vasca, mientras que los tramos alavés y vizcaíno se ejecutan directamente por el Estado. La infraestructura guipuzcoana está finalizada –a falta de la superestructura- mientras en las otras dos provincias las obras prosiguen con diversos grados de ejecución.
A recordar que las obras ejecutadas por encomienda las realiza y sufraga el Gobierno Vasco, que luego se descuenta el importe en el pago del “Cupo”, la fórmula que tienen ambos gobiernos para los mecanismos de solidaridad autonómica y para el pago de los servicios que el Estado presta de forma exclusiva en la Comunidad Autónoma.

En la reunión mantenida por los dos mandatarios el pasado enero con motivo del “Basque Rail Way 2020″, se establecieron una serie de temas como los referidos a la Plataforma Multimodal de Júndiz, en Álava; la Autopista Ferroviaria que tiene allí su futura terminal, el desarrollo de la Variante Sur Ferroviaria, pensada fundamentalmente para mejorar el acceso de las mercancías al puerto de Bilbao; la situación del Corredor Atlántico, como red ferroviaria transeuropea prioritaria Madrid-Vitoria (Y vasca)–Dax, su conexión con Burdeos, así como el enlace hacia Burgos y Navarra. También está en la agenda vasca la reclamación de la transferencia de la gestión de los puertos de Bilbao y Pasaia, junto con la transferencia de aeropuertos y del ferrocarril.
Acuerdos en marcha
Tras la reunión, a la que también asistió el viceconsejero Antonio Aiz, ambas administraciones se han comprometido a estudiar la ampliación de la encomienda y tras el acuerdo alcanzado, el Gobierno Vasco podría ejecutar los accesos de Bilbao (tramo Zaratamo-Abando) y Gasteiz (nudo de Arkaute). Son dos obras de gran envergadura que podrían provocar aún más retraso en la puesta en marcha del “intercity” entre las tres capitales.
El Gobierno Vasco además seguirá trabajando en sus obras “en tiempo y forma” para cumplir con los compromisos adquiridos para que en 2023 esté completado todo el ramal guipuzcoano, incluyendo las estaciones de Donostia (que se adjudicará en las próximas semanas) y Ezkio, que podría licitarse en esta primavera y que contempla un apartadero para los trenes de mercancías.

La petición de no demorar más la instalación de la superestructura en el tramo ya finalizado, también se ha resuelto con la confirmación de ADIF de que ya ha comenzado a redactar el proyecto de superestructura, asegurando “que no será camino crítico”.
Arantxa Tapia destaca que “el impulso de hoy supone redoblar esfuerzos allá donde más retraso se arrastra” ya que se extiende la implicación del gobierno autonómico más allá del territorio guipuzcoano -a Bizkaia y Araba-, habilitando para ello todo el medios personales y técnicos disponibles.
En la reunión no se trató (o no ha trascendido) la transferencia de la gestión de los puertos vascos del sistema de Puertos del Estado, ni la referida a aeropuertos y ferrocarril.