Los Viernes de Cámarabilbao analizan las tendencias empresariales en el 2023

El presidente de PwC en España, Gonzalo Sánchez, ha sido el primer invitado del año a los encuentros empresariales “Los Viernes de la Cámara”, organizados por Cámarabilbao. Prologado por el presidente de la entidad cameral, José Ignacio Zudaire, Sánchez ha subrayado la necesidad de que las empresas se transformen y se adapten a los cambios que conllevan los nuevos modelos económicos anunciados por los indicadores macroeconómicos.

Sánchez ha señalado la necesidad de las empresas de transformarse y ser flexibles para ser capaces de gestionar las crisis presentes y futuras. Para ello, las organizaciones deberán “trabajar en temas de eficiencia, ofreciendo la misma calidad con menores costes, impulsando los productos y servicios que mayor valor generan para compensar el aumento de costes, controlar la deuda y fomentar y cuidar el talento”, y animó a “no renunciar al crecimiento” orientado a lograr una mayor sostenibilidad de la empresa.

Las cinco tendencias del futuro

Durante el encuentro Sánchez ha desgranado las cinco principales tendencias que “condicionan la evolución económica: demografía, transición energética, polarización social, disrupción tecnológica y tensiones geopolíticas”, a las que habría que añadir una sexta, la política monetaria, “un entorno financiero donde se crecía con deuda, y que nos ha llevado a un escenario inflacionista”.

La evolución de esta tendencia estará orientada a reducir la inflación, especialmente la subyacente, por lo que vaticina que “los tipos de interés seguirán subiendo poco a poco, pinchando una burbuja de muchos años, para lograr una ralentización de la economía”.

Intervención de Gonzalo Sánchez en Camarabilbao
Intervención de Gonzalo Sánchez en Camarabilbao

En el contexto europeo, Gonzalo Sánchez ha destacado la unidad y la calidad de los equipos de gestión, pero que deberá “invertir en tecnología, solventar el problema de la productividad, aclarar el marco fiscal y mejorar la agilidad administrativa”, citando como ejemplo los fondos Next Generation, “una buena idea que generaron una gran ilusión”, en los que el funcionamiento de la burocracia ha sido lento.

En el caso de España, las principales ventajas son “una buena estructura empresarial, con grandes empresas a nivel mundial y pymes que han aprendido a exportar, así como un sector financiero fuerte”. También ha destacado “la ventaja competitiva que supone disponer de buenos profesionales a un precio competitivo”.

Como retos, señala “la necesidad de tener seguridad jurídica, la atracción de inversión extranjera, el impulso a las empresas tractoras y la educación”. La situación en Euskadi es similar a la española, según Gonzalo Sánchez, con la ventaja de contar con empresas mejor digitalizadas, un PIB per cápita superior, seguir generando empleo, una elevada competitividad, una mayor inversión en I+D+i y una buena cultura empresarial.