La naviera japonesa K Line y Airseas han obtenido un principio de aprobación de la sociedad de clasificación ClassNK para el diseño del sistema de cometas Seawing, que convierte la energía eólica en fuerza propulsora de buques.
K Line ha reconocido el potencial de la propulsión eólica para reducir las emisiones, después de haber firmado en el 2019 un importante acuerdo con Airseas, con sede en Francia, empresa desarrolladora de cometas de energía automatizada para buques.
Según el acuerdo por un periodo de 20 años, Airseas instalará y dará servicio a un buque con Seawing, un sistema que podrá reducir más del 20% el consumo de combustible y las emisiones de CO2.
La cometa es una vela sujeta a la parte superior de un mástil de 35 metros de altura, montado en la proa del buque. El sistema está vinculado a un cabrestante en la cubierta con un cable que contiene tecnología especialmente diseñada para este sistema de propulsión.
Como explica Airseas, un simple interruptor lanza o recupera la cometa que se despliega, opera y se pliega de forma autónoma.
El sistema recopila y analiza datos meteorológicos y oceánicos en tiempo real, luego adapta su vuelo a esta información para optimizar su rendimiento y garantizar la máxima seguridad.
La primera instalación de una cometa Seawing en un barco granelero del tipo capsize está programada para el 2021 con una navegación entre Japón y Australia. Después se realizarán pruebas de demostración, destinadas a comprobar que se pueden obtener los ahorros del 20% de combustible.
Estas pruebas serán uno de los factores más importantes para K Line, antes de que la compañía se comprometa a instalar las cometas automatizadas de 1.000 metros cuadrados en hasta 50 buques de su flota.