
Elvira Mata
Directora General en funciones del Consorci de les Drassanes Reials i Museu Marítim de Barcelona
Queridos:
Se acerca el día 23 de mayo… y así poco a poquito dejaré de ser trabajadora del Museu Marítim de Barcelona. No os engañaré y pensarlo me produce bastante vértigo…..
Después de una larga vida profesional ligada al Museu Marítim de Barcelona ha llegado el momento de mi jubilación. Una nueva etapa en mi vida que quiero iniciar con alegría y nuevos proyectos. Quien me conoce bien sabe que no me quedaré quieta, que me motivo con facilidad y que seguro sabré encontrar el camino para hacer nuevos aprendizajes, continuar impulsando proyectos, compartiendo y siendo feliz. Una nueva etapa seguro que con añoranzas pero que encaro con fuerza e ilusión.
Hoy solo tengo palabras de agradecimiento hacia la Diputación de Barcelona, administración de la que soy funcionaria de carrera, hacia el Museu Marítim de Barcelona, a mis compañeras y compañeros de trabajo y por supuesto también hacia todas aquellas personas que como vosotros me he encontrado en el camino. Sin duda sin vosotros no hubiera podido llevar a cabo muchos de los proyectos que hemos conseguido lograr de forma compartida con esfuerzo y entusiasmo y casi todos se han concretado con éxito. Algunos se han quedado a medias en el cajón y seguro serán realidad muy pronto.
Llegué de la mano de la Diputación de Barcelona a las Drassanes Reials para hacer documentación de colecciones y poco a poco el trabajo exigió formarse en otros aspectos del mundo de los museos hasta mi incorporación, después de unas oposiciones, como conservadora de museo en el MMB. Ha sido un largo camino lleno de aciertos y seguro que también de algunas equivocaciones, de iniciativas y de muchos proyectos interesantes, fantásticos y muchos de ellos únicos. También de algunos momentos tristes por la pérdida de algún compañero y amigo, otros de complicados y difíciles que hoy ya no merecen ni ser recordados.
Marcho tranquila, contenta y satisfecha del trabajo hecho y con el convencimiento que hemos trabajado de forma intensa y emocionante para contribuir al magnífico proyecto del Museu Marítim de Barcelona. Creo que la responsabilidad ha sido una de las actitudes que ha marcado mi trayectoria en el museo y en general en todos aquellos proyectos profesionales y personales en los que me he involucrado. He querido responder siempre de forma ética a los compromisos adquiridos. He intentado hacer mi trabajo lo mejor que he sabido y trabajar con honestidad, con el máximo respeto hacia la institución y a las personas, y por supuesto con la máxima profesionalidad de la que he sido capaz y al servicio de la comunidad y el territorio.
Ha sido un enorme privilegio vivir todo el que he vivido, nunca me cansaré de mostrar y manifestar mi agradecimiento. El trabajo que he tenido la suerte de poder hacer me ha hecho muy feliz. He tenido la suerte de poder aprender, y he compartido ideas e ilusiones con mucha gente y esto es de una valía extraordinaria…. lo mejor que le puede suceder a una persona en el terreno profesional. He sido muy afortunada. He querido mi trabajo, quiero al museo y espero continuar compartiendo con muchas de las personas que he conocido nuevas experiencias y también continuar disfrutando de su amistad.
El trabajo compartido con los compañeros y compañeras del museo y de los museos de la Xarxa El Mar de Museus y vuestro apoyo ha sido tenaz, alentador, ambicioso y responsable. Esto ha hecho que la situación del patrimonio marítimo en nuestro país se encuentre en una situación muy diferente de la que nos encontramos en nuestros inicios profesionales. Si miramos hacia atrás el trabajo hecho es mucho y la realidad y consolidación de nuestros equipamientos una fantástica realidad. Debemos estar orgullosos … es cierto que queda camino por hacer pero valorando lo que hemos conseguido y siempre al servicio del país.
Sé que echaré de menos muchas cosas … pasearme entre las naves de las Drassanes cuando no hay nadie … incluso sin luz y entre las sombras de los objetos y las vitrinas, sentir la emoción de lo que significa vivir de una forma única y privilegiada de las colecciones del museo, sentirme cerca de algunos objetos, tener especial atención de mi estimado “Santa Eulàlia”, participar de la organización de exposiciones desde dentro, a pesar de los nervios que comporta, disfrutar del paseo inocente de los más pequeños en el jardín del museo con sus miradas inocentes, la sonrisa agradecida de todos los colaboradores o la ilusión de los voluntarios….. mis compañeros de la Xarxa de museos marítimos de la costa catalana, la certeza de su complicidad, compartir un café en momentos concretos, los viajes siempre estresantes llenos de aprendizaje, pero también de muchos momentos de alegría y amistad …. Experiencias vividas que han trenzado vínculos estrechos que me han enriquecido profesionalmente, pero sobre todo que me han hecho crecer como persona.
Mi profundo agradecimiento…. Gracias por todo y por tanto.