La nueva operadora ferroviaria de Alta Velocidad de España, la compañía Ilsa -la alianza entre Trenitalia y Air Nostrum-, tendrá finalmente su sede en Valencia. “Un hecho que contribuirá a mejorar las conexiones de la ciudad, así como su conectividad”, según ha señalado Joan Ribó, alcalde de Valencia, tras la reunión que ha mantenido este martes con el presidente de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, y el consejero delegado de Ilsa, Fabrizio Fabara.
Los representantes de Air Nostrum y de Ilsa aprovecharon su visita al Ayuntamiento de Valencia para presentarle a Ribó el proyecto del operador de Alta Velocidad (AVE) privado que, participada por la compañía aérea valenciana, prestará su servicio a partir del 2022.
“Se trata de una nueva empresa ubicada en la ciudad, con todos los beneficios económicos y sociales que supone”, ha resaltado Ribó, que también ha subrayado “que los impulsores de esta iniciativa apuestan porque el AVE sea un medio para todos los sectores poblacionales, y esto es una apuesta para mejorar la comunicación de Valencia con el resto de las grandes ciudades españolas”.
En nombre de la empresa Ilsa, Fabrizio Fabara, ha destacado que “Valencia es una de las ciudades más importantes de su proyecto”, antes de añadir que “el nuevo servicio de transporte ferroviario aportará un valor añadido a esta ciudad”.
Fabara también ha hablado de inversiones y de activación económica de la ciudad, materializado en al menos 250 puestos de trabajos, y ha considerado la importancia del concepto de intermodalidad, “porque con Ilsa Valencia mantendrá conexiones con todos los sistemas de modalidad”, es decir, con los diferentes métodos de transporte.
Según el proyecto presentado al alcalde, la aportación directa de Ilsa en la Comunidad Valenciana será de 14,8 millones de euros en concepto de salarios y de impuestos autonómicos en el 2025. Otras cifras destacadas son los 244 millones de gasto turístico, un movimiento de 1,8 millones de viajeros, y 23 frecuencias diarias (16 entre Valencia y Madrid).